Durante el jueves 22 de agosto, el Aeropuerto de Melbourne fue escenario de un incidente alarmante cuando un pasajero abrió la puerta de emergencia de un avión estacionado, caminó sobre el ala y descendió por una turbina, causando un significativo caos en el aeropuerto.

Según la Policía Federal Australiana, el hombre mostró un «comportamiento agresivo» y violó los protocolos de seguridad establecidos para la aeronave. El incidente ocurrió después de que el vuelo JQ507 de Jetstar aterrizara procedente de Sídney y se estacionara en una puerta de la terminal.

El pasajero, cuya identidad aún no ha sido revelada, abrió la salida de emergencia de la derecha, lo que provocó el despliegue automático de una rampa de evacuación. Sin embargo, en lugar de utilizar la rampa, el hombre caminó sobre el ala del Airbus A320 y descendió por una de las turbinas. Este comportamiento errático y la consiguiente intervención de las autoridades causaron retrasos en la entrega de equipaje.

Audrey Varghese, una de las pasajeras que presenció el suceso, describió al hombre como «errático» y dijo que comenzó a empujar a la gente y crear conmoción antes de abrir la puerta de emergencia. Otra pasajera, identificada como Maddison, informó a Nine News que el hombre había estado vapeando durante el vuelo, una práctica prohibida a bordo, y que había exigido alcohol al personal de la aerolínea sin éxito.

El incidente provocó un retraso en la entrega de equipaje, ya que la rampa de evacuación desplegada bloqueó temporalmente el acceso a la bodega de carga. Las maletas fueron finalmente liberadas varias horas después.

El arresto del pasajero fue realizado por la Policía Federal tras una alerta activada por el personal de Jetstar. El hombre fue evaluado por paramédicos y posteriormente trasladado a un hospital para una evaluación adicional. La investigación del incidente continúa, y es probable que se presenten cargos en el futuro.

Imágenes compartidas en redes sociales mostraron a al menos tres miembros del personal de tierra inmovilizando al hombre en la pista hasta la llegada de la policía. En un comunicado, Melbourne Airport elogió la rápida reacción del equipo en tierra y aseguró que no hubo peligro inmediato para otros pasajeros ni para el personal del aeropuerto.

Este incidente en Australia ocurre un día después de que la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos anunciara la remisión de 43 casos adicionales de pasajeros indisciplinados al FBI para revisión penal en el último año. Desde finales de 2021, la FAA ha referido más de 310 de los casos más graves al FBI, en un esfuerzo por abordar comportamientos peligrosos a bordo.

El Secretario de Transporte de Estados Unidos, Pete Buttigieg, advirtió que los pasajeros que pongan en riesgo la seguridad de los vuelos enfrentarán severas multas y posibles acciones legales, subrayando la seriedad con la que el gobierno estadounidense aborda las interrupciones en los vuelos.