El poderoso tifón Shanshan tocó tierra este jueves en la isla principal de Kyushu, al suroeste de Japón, y ha dejado por el momento 3 muertos, 82 heridos y un desaparecido, además de llevar a las autoridades a recomendar la evacuación de millones de personas.
El fenómeno meteorológico, el décimo de este tipo de la temporada en el Pacífico y catalogado como “muy fuerte” en la víspera por las autoridades niponas, está provocando a su paso lluvias torrenciales, inundaciones, vientos huracanadas y marejadas ciclónicas.
Al menos tres personas han fallecido durante una avalancha de tierra que tuvo lugar dos días antes por el frente de lluvias causado por el tifón en Gamagori, Aichi (centro del país), según las últimas cifras ofrecidas por las autoridades niponas.
Otras 82 personas han sufrido heridas de diversa consideración, la mayoría de ellas en las prefecturas de Miyazaki y Kagoshima (sudoeste). El desaparecido es un hombre de unos 60 años que cayó al mar en el puerto de Kagoshima en la víspera mientras trataba de amarrar su barco, según detalló la cadena pública NHK.
El tifón ha provocado inundaciones en vías públicas de localidades como Tsu, en la prefectura de Mie (centro), o en zonas agrícolas y urbanas de Oita (suroeste), además de dejar centenares de viviendas dañadas por las ráfagas de viento en Miyazaki y Kagoshima.
Se recomienda evacuar a millones de personas
Las autoridades japonesas recomendaron este jueves la evacuación de localidades que suman más de 500.000 personas al sudoeste del país, lo que se suma a los 2,5 millones afectados por recomendaciones similares en la víspera, aunque esto no significa que todos ellos acudan a los refugios habilitados para evacuados, y por el momento se desconoce cuántas personas optaron por hacerlo.
Tras tocar tierra al sudoeste del país este jueves a las 8:00 hora local (23:00 del miércoles GMT), el tifón continúo desplazándose lentamente -a una velocidad de 15 kilómetros por hora- en dirección noreste por la isla de Kyushu, según la Agencia Meteorológica de Japón (JMA), que prevé que mantenga ese rumbo y su intensidad en las próximas horas.
El paso del tifón, de gran tamaño -su radio es de 110 kilómetros- y capaz de desencadenar rachas de viento de hasta 50 metros por segundo y precipitaciones de más de 70 milímetros por hora, hacen que la JMA mantenga la máxima alerta meteorológica en gran parte del sudoeste del país y otras zonas del oeste y el centro del archipiélago, adonde se aproximará en los próximos días.
Las lluvias torrenciales acumuladas que ha dejado el Shanshan han alcanzado niveles récord o inéditos en varias décadas en varios puntos al sudoeste del país, lo que ha derivado en alertas sobre el riesgo de desplazamientos de tierra y de desbordes de ríos.
Graves interrupciones del transporte
El fenómeno meteorológico también ha causado alteraciones a gran escala en el transporte aéreo, ferroviario y por carretera en casi toda la mitad oeste del país.
Las dos principales aerolíneas niponas, Japan Airlines y ANA, anunciaron la cancelación de 1.120 vuelos domésticos entre este jueves y el viernes desde aeropuertos del sudoeste del archipiélago.
El servicio de tren bala (‘shinkansen’) entre Kumamoto y Fukuoka también ha quedado suspendido hoy, al igual que la línea de alta velocidad que une Nagasaki y Takeo, y la mayoría de líneas locales de tren tampoco operan en la zona.
Asimismo, las empresas de ferrocarril han informado de que, al compás del avance previsto de Shanshan hacia Honshu (isla principal del archipiélago nipón), la línea de alta velocidad entre Fukuoka y Osaka va a resultar afectada con cancelaciones o suspensiones de jueves a sábado y la línea que une Osaka y Tokio entre el viernes y el domingo, entre otras.
El tifón ha provocado también el cierre de múltiples tramos de autopistas, y ha dejado sin luz a 203.000 hogares en siete prefecturas de Kyushu, según la compañía operadora.
La JMA prevé que el Shanshan continúe avanzando en dirección este durante el viernes, atravesando la isla de Shikoku y el extremo occidental de Honshu, pudiendo llegar a las región de Kansai durante el fin de semana y a Tokio el próximo lunes.