El veterano atacante uruguayo Cristhian Stuani, capitán del Girona, se consagró como leyenda rojiblanca al llegar a los 250 partidos oficiales con el club en el triunfo de este jueves ante el Osasuna (4-0) y lo celebró con un tanto para cerrar la goleada, el primer gol de su octavo año en Montilivi.

En ninguna de estas ocho temporadas Stuani ha necesitado más de tres jornadas para inaugurar su cuenta particular: su primer gol llegó en la primera fecha en las campañas 2017-18 y 2021-22, en la segunda jornada en las temporadas 2020-21, 2022-23 y 2023-24 y en la tercera jornada en la 2018-19, la 2019-20 y la presente, 2024-25.

Desde que recaló en Montilivi en verano de 2017, el uruguayo ha roto todas las expectativas y ya suma 131 goles con la camiseta del Girona, consagrándose como uno de los símbolos del club y para muchos el mejor jugador de su historia.

Consiguió 21 y 20 goles en las temporadas 2017-18 y 2018-19 en Primera, se quedó tras el descenso para devolver al equipo a la élite y marcó 31, 10 y 24 goles en los cursos 2019-20, 2020-21 y 2021-22, y, en los dos últimos años, ha logrado 10 y 14 goles, como suplente de garantías de Taty Castellanos y Artem Dovbyk.

Esta campaña, con 38 años, Stuani será suplente de Bojan Miovski y Abel Ruiz, pero el delantero quiere seguir sumando y alimentando su leyenda tal y como demostró cerrando la goleada contra Osasuna.

Es el máximo goleador histórico y el jugador con más partidos en el fútbol profesional como gerundense, por delante de Juanpe Ramírez (246), Borja García y Àlex Granell (233) y Migue González (222).

Ha jugado 130 partidos en Primera, 98 en Segunda, 12 en la Copa del Rey y 10 en la promoción de ascenso a Primera, con 59, 61, 7 y 4 goles respectivamente.

Y pronto podrá debutar en la Liga de Campeones como capitán, pues el técnico, Míchel Sánchez, siempre rendido a Stuani, ya avanzó la temporada pasada que el uruguayo llevaría el brazalete en el primer partido del Girona en Europa.