A sus 40 años de edad, el quarterback Aaron Rodgers buscará en la temporada 2024 saldar la deuda que tiene con New York y liderar a los Jets en su regreso a un partido por el título de la NFL, luego del lejano triunfo que obtuvo el equipo en el Super Bowl III hace 55 temporadas.

Una misión que debió emprender hace un año, cuando fue contratado por los neoyorquinos después de pasar 18 temporadas en Green Bay.

Su presencia, previa a la campaña 2023 fue una lluvia de expectativas que llevaron a una presentación llena de fuegos artificiales ante un abarrotado MetLife Stadium que rugió al verlo entrar al campo enarbolando, cual ‘Capitán América’, la bandera estadounidense para el duelo ante los Bills del 11 de septiembre de aquel año.

La efervescencia duró cuatro jugadas, porque Rodgers quedó tendido en el campo por una rotura del tendón de Aquiles que lo dejó fuera el resto de una temporada en la que los Jets naufragaron con siete ganados y 10 perdidos, sin entrar a los playoffs.

Un año después, Rodgers está recuperado de esa lesión y en los neoyorquinos el entrenador, Robert Saleh, confía en que su veterano mariscal de campo se mueve en el campo como alguien más joven.

«Se ve increíble mental y físicamente. Se ha preparado y si sigue concentrado simplemente hará el trabajo. Lo ha hecho durante mucho tiempo, no es un quarterback de 40 años, se ve mucho mejor», confía Saleh.

Aaron Rodgers debutará en la campaña 2024 en los controles de los Jets el próximo lunes en la casa de San Francisco 49ers, campeones de la Conferencia Nacional, que poseen una de las mejores defensivas de la NFL que pondrá a prueba el grado de recuperación del veterano.

La longevidad de Rodgers no es común entre los mariscales de campo en la NFL.

Desde el año 2000, incluido Aaron, sólo ocho quarterbacks se mantuvieron activos a esa edad; Tom Brady, Brett Favre, Drew Brees, Matt Hasselbeck, Warren Moon, Vinny Testaverde y Brad Johnson, todos están retirados.

De ellos, sólo dos, el histórico Tom Brady y Brett Favre, jugaron 16 partidos en su campaña con 40 años.

Brady, quien se retiró a los 45 años, es un caso aparte en esta estadística, ya que después de los 40 ganó dos de los siete Super Bowls que obtuvo en sus 24 años de carrera.

Dos trofeos Lombardi que al menos en la mente de Rodgers no es una marca imposible de igualar.

«Desde que llegué lo dije, quiero dos buenas temporadas para darme la oportunidad de retirarme como un ‘Jet’ y no habría nada mejor que hacerlo ganando dos Super Bowls», afirmó en julio pasado.

El mariscal de campo nacido en Chico, California, llegó a la NFL seleccionado en la primera ronda del Draft 2005 por los Green Bay Packers, equipo en el que se convirtió en una leyenda luego de ganar el Super Bowl XLV.

En 2023 firmó con los Jets con la intención de revivir las glorias que vivieron los neoyorquinos en la temporada de 1968, cuando llegaron al Super Bowl III, el único de su historia, en el que triunfaron 16-7 sobre los Colts, bajo el liderazgo del quarterback, Joe Namath, y del entrenador, Weeb Ewbank.

«Confíen. Sabemos que si perdemos el titular será ‘Los mismos Jets de siempre’, pero estoy seguro de mi rendimiento por lo que cuando salgo al campo espero algo grandioso y un titular que al final diga ‘Vamos al Super Bowl'», es la promesa de Rodgers.