El tifón ‘Yagi’, uno de los fenómenos meteorológicos más intensos de la temporada, tocó tierra el viernes en la isla turística de Hainan, China. La tormenta, que previamente había causado estragos en el sur de Hong Kong, obligó a cerca de un millón de personas a abandonar sus hogares, paralizando diversas actividades en la región.
De acuerdo con la agencia meteorológica provincial de Hainan, ‘Yagi’ llegó a la ciudad de Wenchang alrededor de las 16:20 horas locales, con vientos que alcanzaron hasta 245 kilómetros por hora en su vórtice. Las autoridades prevén que la tormenta se desplace hacia otras áreas de la isla antes de continuar su trayecto hacia el golfo de Beibu.
El tifón ha sido catalogado como el más potente de la temporada otoñal en China, y se espera que impacte nuevamente en el condado de Xuwen, en la provincia vecina de Guangdong, durante la noche del viernes. Las estimaciones indican que más de 420 mil residentes de Hainan y más de medio millón en Guangdong han sido reubicados como medida preventiva.
Las fuertes lluvias y los vientos intensos han ocasionado cortes de electricidad y daños significativos en la infraestructura de Hainan. Los residentes han implementado medidas de protección, como la construcción de barreras con sacos de arena y el refuerzo de ventanas con cinta adhesiva, para mitigar los efectos de la tormenta, según informó la agencia de noticias Xinhua.
El impacto de ‘Yagi’ ha llevado al cierre de escuelas, la suspensión de actividades laborales y la paralización del transporte en varias áreas de Hainan desde la noche del miércoles. En la ciudad de Haikou, el aeropuerto internacional ha suspendido todos los vuelos. Además, la televisora estatal CCTV ha informado que la ciudad de Qinzhou, en la región de Guangxi, ha emitido una alerta de emergencia máxima. Se prevé que el tifón vuelva a tocar tierra entre la ciudad de Fangchenggang y la costa norte de Vietnam el sábado por la tarde, lo que ha llevado a la ciudad de Beihai a suspender sus actividades laborales y educativas.
En Hong Kong, las autoridades emitieron un aviso de nivel 8, el tercer nivel más alto en su escala de alertas, lo que llevó a la suspensión de operaciones bursátiles, servicios bancarios y actividades escolares. Más de 270 personas buscaron refugio en albergues temporales, y se cancelaron más de un centenar de vuelos. El tifón ha dejado a su paso nueve personas heridas y numerosos árboles derribados.
El tifón ‘Yagi’ se encontraba aún en su fase de tormenta tropical cuando, el miércoles, impactó el noroeste de Filipinas, causando al menos 16 fallecimientos y 17 personas desaparecidas debido a deslaves e inundaciones generalizadas. Más de 47 mil 600 personas fueron desplazadas y se interrumpieron clases, actividades laborales, servicios de transbordadores entre islas y vuelos domésticos en la región, incluida la metropolitana Manila.
Las autoridades continúan monitoreando el desarrollo del tifón y realizando esfuerzos para mitigar los efectos de esta poderosa tormenta en las regiones afectadas.