La madrugada de este miércoles, el Senado de la República aprobó la controvertida Reforma Judicial impulsada por el presidente López Obrador, y en pocas horas, la minuta fue enviada a los Congresos estatales para su ratificación. Hasta el momento, la reforma ha sido aprobada en Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz, Nayarit, Yucatán, Baja California, Baja California Sur, Colima, Morelos y Durango, donde Morena y sus aliados tienen mayoría legislativa. En tanto, en Tamaulipas y Puebla, la iniciativa solo avanzó en comisiones.

En Querétaro, la Comisión de Puntos Constitucionales rechazó la reforma, calificándola como un «retroceso» para el país. El diputado Manuel Pozo Cabrera, presidente de la comisión, argumentó que la reforma es fruto de «una revancha y un berrinche» y no responde a un análisis serio de las problemáticas del Poder Judicial.

Por su parte, en Nuevo León, donde gobierna Movimiento Ciudadano, la discusión de la reforma fue aplazada debido a la falta de acuerdos entre los diputados. La Mesa Directiva del Congreso estatal convocó a una nueva sesión para el 17 de septiembre.

El Congreso de Oaxaca fue el primero en aprobar la reforma en una sesión que duró solo seis minutos, sin debate y con el apoyo unánime de los diputados del PRI, PAN y PRD. El gobernador de Oaxaca, Salomón Jara, celebró el respaldo de su estado a la reforma, calificándola como un paso hacia un sistema de justicia más democrático e independiente.

La rápida aprobación en varios estados, especialmente en aquellos donde Morena tiene mayoría, contrasta con la oposición en otros, como Querétaro y Nuevo León, donde la reforma enfrenta un camino más complicado.