Brasil está viviendo una sequía extrema, y algunos ríos de la cuenca del Amazonas han alcanzado niveles de agua más bajos en la historia. El Servicio Geológico de Brasil reportó que, en Porto Velho, el río Madeira bajó a solo 48 cm, muy por debajo de su nivel habitual de 3,32 m para esta época.
Mientras que el río Solimões en Tabatinga, en la frontera con Colombia, también registró su nivel más bajo.
La agencia de monitoreo de desastres, Cemaden, calificó esta sequía como la más intensa y extendida jamás registrada. Lo preocupante es que ha comenzado temprano en la estación seca, lo que sugiere que la situación podría empeorar en los próximos meses.
La situación en la Amazonia, podría ser crítica durante los siguientes meses, lo que aperturaría una desventaja ante la batalla contra el cambio climático, ya que esta es de gran ayuda en esta lucha, además de ser una rica fuente de biodiversidad.