Los últimos sucesos protagonizados por el Frente Atlético este domingo en el estadio Metropolitano, con un lanzamiento de objetos a Thibaut Courtois y la aparición de bengalas en Roma tiradas por los Herri Norte en la Europa League han incrementado la inquietud en la policía, en LaLiga y la sociedad española, ante el fenómeno ´’ultra’ que parecía ‘dormido’ en el tiempo, justo en un día donde en Italia fueron arrestados hoy decenas de integrantes de hinchas del Inter y el Milán, sospechosos de «delitos de conspiración criminal».

La eliminación de los Ultras Sur, del Real Madrid, con la aparición de la nueva grada de animación; y de los Boixos en el Camp Nou, con sendas políticas contundentes de Florentino Pérez y de Joan Laporta desde la presidencia de ambos clubes en su momento, minimizaron el ruido de los grupos radicales en España, que sigue contando aún con segmentos extremistas que ponen en peligro la reputación de los clubes.

El paisaje ultra en España comienza con el Frente Atlético. Fundado en 1982, el Frente Atlético es uno de los grupos más activos y numerosos, con más de dos mil miembros, del panorama ultra español en la actualidad, muy vigente en el fondo sur del estadio Metropolitano, a pesar de la prohibición como peña y sus emblemas por parte del club desde 2014, tras el asesinato del seguidor del Deportivo de La Coruña Jimmy en una pelea multitudinaria en la ribera del Manzanares entre los radicales rojiblancos y los Riazor Blues antes de un partido entre ambos equipos.

De ideología de extrema derecha, lo sucedido este domingo en el derbi con el lanzamiento de objetos agranda su larga lista de incidentes a lo largo de su historia; también reciente, como el sonido racista surgido desde el fondo sur hacia Nico Williams que ya detuvo durante unos instantes el partido del pasado abril contra el Athletic Club.

En los últimos tiempos, además, en 2023 cuatro ultras del Atlético de Madrid, miembros del Frente Atlético, según la Fiscalía, colgaron de un puente un muñeco con la camiseta del futbolista del Real Madrid Vinicius Júnior y el club rojiblanco fue sancionado en 2022 con el cierre parcial del Metropolitano por la exhibición de una bandera con simbología nazi por parte de los ultras en los cuartos de final de la Liga de Campeones ante el Manchester City. En diciembre de 2006, dos seguidores del Atlético de Madrid fueron detenidos por realizar presuntamente pintadas con amenazas de muerte al presidente del club, Enrique Cerezo, en la fachada de su domicilio.

Entretanto, esta semana en partido de la Europa League en el Olímpico de Roma, en el duelo Roma – Athletic de Bilbao, la policía italiana identificó al acabar el Roma-Athletic del jueves a dos miembros de Herri Norte. El Athletic Club mostró esa misma noche un comunicado «tolerancia cero ante situaciones como la ocurrida en el Olímpico de Roma «. «El Athletic Club quiere expresar su más firme condena ante los inaceptables actos protagonizados por una minoría de personas que se desplazaron al partido de la Europa League disputado frente a la AS Roma y que estaban ubicados en la grada visitante. Durante el encuentro, este reducido grupo prendió bengalas y lanzó alguna de ellas a la grada local, contraviniendo las normas de seguridad y ensuciando la imagen de nuestra afición, conocida por su comportamiento ejemplar y su apoyo incondicional al equipo en cualquier circunstancia».

Otros grupos ultra de la Liga española en Primera división son los Biris Norte, en el Sevilla FC; los Bukaneros del Rayo Vallecano o el grupo Indar Gorri de Osasuna.

‘Biris Norte’ es el grupo radical del Sevilla que últimamente no ha protagonizado incidentes de extrema gravedad en los estadios, aunque hace aproximadamente un año la Policía Nacional detuvo y puso a disposición judicial a cuatro miembros de este colectivo por una pelea de la que se derivaron graves lesiones y que se suscitó entre dos facciones del grupo por su control.

En el Real Betis también ocurre algo parecido, ya que la Comisión Permanente de la Comisión Estatal contra la Violencia, el Racismo, la Xenofobia y la Intolerancia en el Deporte tiene incluido en la lista de grupos radicales y violentos a «United Family», «Supporters Gol Sur». Fue muy significativo un incidente que se produjo en enero de 2022 durante un partido de la Copa del Rey disputado en el Benito Villamarín entre el Betis y el Sevilla, cuando desde la grada baja de Gol Norte, donde se ubican estos radicales, se lanzó una barra de PVC que alcanzó en la cabeza del sevillista Joan Jordán, por lo que se suspendió el partido y se reanudó al día siguiente a puerta cerrada.

Bukaneros, fundados en 1992, son los aficionados que ocupan el único fondo del estadio de Vallecas. Comprometidos con su barrio, muestran su apoyo al equipo promoviendo una ideología de izquierdas basada en el «antiracismo y el antifascismo», como corean en cada partido . De hecho, en este sentido, a comienzos de 2017, estos aficionados encabezaron las protestas que acabaron con el fichaje frustrado del ucraniano Roman Zozulya, al que acusaron de ser neonazi a través de unas publicaciones en sus redes sociales.

Las denuncias por racismo formuladas por LaLiga en los últimos meses han visto desde esta semana añadir un punto más a este repunte del mundo ultra en el fútbol, que se asoma de nuevo al primer plano y obligan a la Comisión anti violencia y a los comités de competición de la Rfef a volver a ser referentes de la actualidad de la resaca futbolística del fin de semana.