En una reciente entrevista para el podcast Happy Sad Confused, Tom Hanks se convirtió en el centro de atención al abordar tanto la industria del cine como la evolución de las películas de superhéroes, una de las franjas más rentables de Hollywood en las últimas dos décadas. Durante su conversación, el actor expresó su deseo de ver una nueva dirección en las tramas de las películas de superhéroes, las cuales, según él, han permanecido estancadas a lo largo del tiempo.
“Ya hemos recorrido ese camino. Hemos tenido 20 años para explorar ese tipo de cosas, y ahora estamos en una evolución y nos preguntamos: ¿Y cuál es la historia? ¿Cuál es el tema? ¿Cuál es el objetivo de esta película?”, comentó Hanks, quien dejó claro su deseo de ver más innovación en los guiones y una exploración más profunda de los temas que abordan estas historias.
Sin embargo, el actor también reconoció el impacto cultural de las películas de superhéroes, señalando que durante un tiempo estas cintas permitieron a las audiencias conectar con versiones mejoradas de sí mismos. «Hubo un período de tiempo, y yo también lo sentí así, donde veíamos películas de DC y MCU para ver estas mejores versiones de nosotros mismos. Dios, a veces me siento como un X-Men. Estoy tan confundido como Spider-Man. Estoy tan enojado como Batman. Amo a mi país tanto como el Capitán América», dijo el protagonista de Forrest Gump.
En el mismo contexto, Hanks aprovechó para aclarar que, aunque ha sido parte de algunas de las películas más exitosas del cine, nunca ha tenido una reunión con Kevin Feige o James Gunn para discutir una posible incorporación a los universos de DC o Marvel. Esto desmiente los rumores sobre su participación en futuros proyectos de estos universos.
El actor también destacó cómo la tecnología ha transformado la industria cinematográfica, permitiendo que las películas de superhéroes sean cada vez más realistas. “Recuerdan que en los años 70 y 80 intentaron hacer versiones para televisión del Capitán América y el Hombre Araña? Incluso Batman, el de Adam West. No existía la tecnología para que se viera como en los cómics y ahora sí”, explicó. A modo de ejemplo, mencionó Superman (1978), protagonizada por Christopher Reeve, como la primera película en la que la tecnología jugó un papel fundamental para que el vuelo del superhéroe fuera realmente creíble: “Todos creímos que un hombre podía volar cuando lo vimos. Fue algo extraordinario”.
Sin embargo, Tom Hanks también se mostró crítico con la tendencia de algunos productores a centrarse más en los efectos visuales y escenas espectaculares que en la construcción de una buena historia. Para él, el poder de la tecnología no debe ser un fin en sí mismo, sino un medio para enriquecer las historias que se cuentan. “Ahora podemos hacer que suceda cualquier cosa en la pantalla, estamos volviendo al concepto de ‘okay, eso es verdad, pero ¿Cuál es la historia?’”, expresó, y agregó que la falta de una narrativa sólida podría ser una de las razones por las cuales películas como The Marvels y The Flash han fracasado en taquilla.
“La industria suele decir que si esto funciona, funcionará de nuevo. Pero el público está muy adelantado. Ven lo que les resulta familiar y dicen: ‘Ya lo he visto. ¿Qué sigue?’» comentó Hanks, refiriéndose a cómo el público ya no se conforma con lo mismo de siempre. «No se trata solo de cosas sorprendentes. Se trata de: ‘¿Cuál es la historia? Háblame de mí’».
Con estas declaraciones, Tom Hanks se suma a la creciente discusión sobre el futuro del cine de superhéroes y la necesidad de renovarse, no solo en términos tecnológicos, sino también en cuanto a la profundidad de las historias que se cuentan en la pantalla grande.