La Casa Blanca aseguró este lunes que su estrategia en lo referente a una posible negociación entre Ucrania y Rusia es llevar a Kiev a “la posición más fuerte posible” y aseguró que es Moscú, no Washington, quien promueve una escalada en el conflicto.

“Nuestra política ha sido poner (a Ucrania) en la posición más fuerte posible tanto durante toda esta Administración como tras la invasión de 2022”, apuntó Jon Finer, asesor del presidente estadounidense, Joe Biden, en un encuentro con la prensa en Río de Janeiro durante la cumbre del G20.

Finer hizo estos comentarios en relación a una posible negociación entre Ucrania y Rusia, algo a lo que Kiev podría verse forzado con la llegada en enero al poder del presidente electo, Donald Trump, quien ha prometido poner fin al conflicto en “24 horas” sin dar detalles de cómo.

En su opinión, solo debe considerarse la determinación de Ucrania de negociar con Rusia y “no tiene nada de contradictorio” la decisión del canciller alemán, Olaf Scholz, de hablar la semana pasada con el presidente ruso, Vladímir Putin, por primera vez en dos años.

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, ha criticado esa conversación por sacar del aislamiento a Putin y abrir una “caja de Pandora”.

“Estados Unidos se coordina de cerca con sus aliados, especialmente con Alemania, obviamente en temas relativos a Ucrania. En lo referente a negociaciones no es cuestión que competa a Estados Unidos o a Alemania, sino al Gobierno de Ucrania”, explicó el asesor de la Casa Blanca.

Las dificultades de la negociación

El mismo alto funcionario estadounidense indicó que pese a las dificultades de negociar un lenguaje común en el seno del G20, esperan incluir el “lenguaje más contundente posible” en el comunicado conjunto de la cumbre que se celebra en la ciudad brasileña.

Finer no quiso confirmar las informaciones de que Biden ha autorizado a Ucrania el uso de armas estadounidenses de largo alcance ATACMS para ataques limitados dentro de territorio ruso, como revelaron los diarios The Washington Post y The New York Times el domingo.

El funcionario rechazó las acusaciones del Kremlin de que estén echando “leña al fuego”, pero dijo que tomarán decisiones en base a pasos rusos que consideren una escalada.

“Rusia ha estado librando una guerra de agresión contra las fronteras de un Estado soberano y continúa. Y hemos visto, además del despliegue de tropas de Corea del Norte, una importante escalada con ataques aéreos a infraestructuras en Ucrania en las últimas 24 horas”, apuntó.