El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, anunció que el Gabinete de Seguridad de Israel ha aceptado un acuerdo de alto el fuego con Hezbolá en Líbano, que tendrá una duración inicial de 60 días. No obstante, Netanyahu dejó claro que la duración de este cese al fuego dependerá de las acciones de Hezbolá en el futuro. Según el mandatario israelí, el país continuará manteniendo su «libertad de acción» en caso de que el grupo armado infrinja el acuerdo.
«La duración del alto el fuego dependerá de lo que suceda en Líbano», señaló Netanyahu en una declaración. «Nos aseguraremos de mantener la libertad total de movimiento», añadió, advirtiendo que cualquier violación por parte de Hezbolá podría dar pie a una respuesta militar por parte de Israel.
El acuerdo se produce en medio de una creciente tensión en la región, caracterizada por recientes enfrentamientos entre las fuerzas israelíes y el grupo chiita respaldado por Irán. Netanyahu explicó que este alto el fuego brindará a Israel la oportunidad de concentrarse en la amenaza iraní, un desafío de seguridad que sigue siendo central en la agenda de defensa del país.
Esta noche, el Gabinete de Seguridad se reunirá para evaluar la situación y discutir el acuerdo. Según Netanyahu, se recomienda la aprobación formal del alto el fuego durante dicha reunión, aunque cualquier violación por parte de Hezbolá podría cambiar el curso de los acontecimientos.
Con este acuerdo, Israel busca aliviar la presión en su frontera norte, aunque subraya que continuará vigilando de cerca las acciones de Hezbolá, con la capacidad de responder si es necesario.