En un contexto de intensificación del conflicto en Ucrania, el presidente ruso Vladímir Putin ha aprobado un presupuesto con un aumento récord en el gasto militar para el año 2025, destinando un 32,5% de los fondos totales a la defensa nacional, lo que equivale a 13,5 billones de rublos (más de 145.000 millones de dólares). Este aumento, comparado con el 28,3% del presupuesto de este año, refleja la creciente inversión de Rusia en su esfuerzo bélico, mientras busca prevalecer en la guerra contra Ucrania, que ya lleva casi tres años en curso.
Los planes presupuestarios fueron aprobados en los últimos 10 días por ambas cámaras del Parlamento ruso, la Duma Estatal y el Consejo de la Federación. Este conflicto, el más grande de Europa desde la Segunda Guerra Mundial, ha agotado los recursos de ambos bandos, con las fuerzas rusas logrando avances significativos en las últimas semanas, particularmente en el este de Ucrania.
Mientras tanto, los aliados de Ucrania, especialmente la Unión Europea, continúan fortaleciendo su apoyo a Kiev. El presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, y la jefa de Política Exterior de la UE, Kaja Kallas, llegaron a Kiev este domingo, en su primer día en el cargo, para reafirmar el compromiso de la UE con Ucrania. «Desde el primer día de la guerra, la UE ha estado al lado de Ucrania», expresó Costa en redes sociales, destacando el respaldo inquebrantable del bloque europeo.
En su visita, Costa reiteró el reciente compromiso de la UE de ayudar a Ucrania durante la guerra, que incluye 4.200 millones de euros (4.400 millones de dólares) para el presupuesto de Kiev, así como una asistencia mensual de 1.500 millones de euros (1.600 millones de dólares) proveniente de los activos rusos congelados. Además, Costa aseguró que la UE mantendrá su apoyo «todo el tiempo que sea necesario», incluso ante posibles cambios en la administración de Estados Unidos, especialmente con la posibilidad de un regreso de Donald Trump a la Casa Blanca.
Por su parte, el presidente ucraniano Volodymyr Zelenskyy agradeció el apoyo de la UE y destacó que cualquier futura negociación con Rusia debería involucrar a representantes de la UE y la OTAN, considerando que Ucrania ve su seguridad futura en ambas alianzas. Zelenskyy también hizo un llamado a la administración saliente de Joe Biden para que use los próximos dos meses para influir sobre los «escépticos europeos» respecto a la membresía de Ucrania en la OTAN.
En el terreno, los combates continúan cobrando víctimas. En la ciudad sureña de Jersón, un ataque con dron ruso mató a tres personas y dejó siete heridas. Mientras tanto, el número de heridos en un ataque con misiles en Dnipro aumentó a 24, con siete personas en estado grave. Cuatro personas perdieron la vida en el ataque, y Moscú ha enviado 78 drones a Ucrania durante la madrugada, de los cuales 32 fueron destruidos y 45 se perdieron probablemente por interferencia electrónica.
En respuesta, Ucrania también ha intensificado sus ataques. Un niño murió en un ataque con dron ucraniano en la región rusa de Briansk, que limita con Ucrania. Según el Ministerio de Defensa de Rusia, 29 drones ucranianos fueron derribados en la madrugada del domingo en varias regiones rusas cercanas a la frontera.
Este aumento en la actividad militar por parte de ambos bandos y la intensificación de la guerra auguran un prolongado conflicto, con la comunidad internacional profundamente involucrada en el destino de Ucrania.