Las acciones de Grupo Elektra sufrieron una caída histórica del 70.98% este lunes, cerrando a 274.27 pesos por título en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). Este desplome ocurrió después de que las autoridades financieras ordenaran la reanudación de las operaciones de la empresa, que había sido suspendida desde el 26 de julio de 2024.
La pérdida total en valor de mercado de la compañía, que se calcula en 148 mil 691 millones de pesos (aproximadamente 7 mil 276 millones de dólares), es uno de los mayores retrocesos en la historia reciente de la bolsa mexicana. Antes de la suspensión, las acciones de Elektra habían alcanzado un valor de 944.95 pesos, con una capitalización de mercado de 209 mil millones de pesos.
Tras la reanudación de operaciones, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) ordenó que las acciones volvieran a cotizar, pero la emisora comunicó que se registraron «movimientos anormales en cuanto a precio y volumen operado», lo que causó un daño irreparable. A través de un comunicado, Elektra advirtió a los participantes del mercado sobre el riesgo de realizar operaciones con sus acciones en un contexto tan volátil, sugiriendo que cualquier transacción podría implicar responsabilidad.
La caída en el precio de las acciones de Elektra coincide con el anuncio de que la compañía dejará de estar listada en la BMV después de más de 30 años de cotización. Según la empresa, esta decisión se debe a que la cotización de sus acciones no ha reflejado su verdadero valor y no ha representado un beneficio adecuado para sus accionistas.
Como parte de su nueva estrategia, Elektra convocó a una asamblea de accionistas para el 27 de diciembre con el objetivo de discutir una posible privatización de la compañía. A pesar de la caída drástica en el precio de sus acciones, algunos inversionistas consideran que la oferta pública de adquisición que se propone podría hacer que las acciones de Elektra se vuelvan atractivas, aunque advierten que el riesgo de una nueva suspensión es alto.