El 9 de diciembre se cumplieron tres meses de lo que ha sido denominado la ‘narcopandemia’ en Sinaloa, un fenómeno originado tras la detención de Ismael «el Mayo» Zambada, uno de los líderes más importantes del Cártel de Sinaloa. Desde ese momento, la violencia en el estado ha aumentado de forma alarmante, con un total de 546 asesinatos, 415 privaciones ilegales de la libertad y 1,754 robos de vehículos.
La situación en Culiacán, la capital del estado, se ha vuelto cada vez más desoladora. Las calles muestran viviendas vandalizadas, fincas dañadas y negocios cerrados. Muchos de estos establecimientos tienen carteles ofreciendo su venta o renta, ya que los propietarios se ven obligados a abandonar sus operaciones debido a la creciente inseguridad.
La economía local ha sufrido un golpe profundo, especialmente en sectores como el de los músicos y meseros, que dependen de la vida nocturna. La cancelación de eventos y el cierre masivo de restaurantes y bares han llevado a la pérdida de estos empleos. Lo que antes era una vibrante vida nocturna, hoy ha desaparecido casi por completo debido a los enfrentamientos entre grupos del crimen organizado.
Según los empresarios de la región, la economía local ha perdido alrededor de 25,000 empleos formales, lo que ha generado una pérdida de al menos 18,000 millones de pesos. Esta cifra fue confirmada por Cristina Ibarra, presidenta del Colegio de Economistas de Sinaloa, quien destacó que la crisis económica generada por la violencia representa el 3.5% del Producto Interno Bruto (PIB) estatal. “El impacto económico que estamos viviendo a nivel macro es de 18,000 millones de pesos, lo que representa una parte significativa de nuestra economía local”, señaló Ibarra.
A tres meses de la detención de «el Mayo» Zambada, el panorama en Sinaloa sigue siendo incierto. La violencia continúa afectando a la sociedad y las consecuencias, tanto económicas como sociales, son cada vez más evidentes. La población sigue viviendo bajo la constante amenaza de los cárteles de la droga, que han cambiado de manera dramática la dinámica del estado.