Una poderosa tormenta invernal, denominada Blair, está afectando a gran parte de los Estados Unidos, generando fuertes nevadas, capas de hielo y temperaturas extremadamente bajas. Estos fenómenos climáticos han causado la muerte de más de cuatro personas y ocasionado importantes problemas en el transporte y en la vida diaria de millones de personas.

El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos (NWS) ha emitido alertas para varias regiones, desde Illinois hasta la costa Atlántica, afectando a cerca de 34 millones de personas. Las condiciones extremas incluyen nevadas intensas, acumulación de hielo y temperaturas bajo cero.

En el sector del transporte, la tormenta ha provocado la cancelación de miles de vuelos y retrasos en otras rutas, tanto aéreas como ferroviarias. Según datos de FlightAware, cerca de 2.000 vuelos fueron cancelados y más de 2.400 experimentaron retrasos hasta las 11 a.m. del lunes. Las interrupciones también han afectado los servicios de trenes, que han tenido que suspender o retrasar numerosos trayectos.

Las carreteras también representan un grave peligro, ya que la nieve y el hielo han provocado varios accidentes, entre ellos, cuatro fatales. Las autoridades han instado a la población a evitar viajar sin necesidad y a tomar precauciones al conducir.

Además, la tormenta ha interrumpido la actividad habitual en muchas áreas, con cierres de escuelas, empresas y cortes de electricidad. En cuanto a las víctimas, en Kansas se registraron tres muertes en accidentes de tráfico, mientras que en Missouri, una persona perdió la vida y más de 30 resultaron heridas.

El NWS ha alertado que las condiciones de clima severo continuarán en los próximos días, con más nevadas y temperaturas gélidas. Las autoridades están preparadas para seguir gestionando las emergencias y han recomendado a la población abastecerse adecuadamente para cualquier eventualidad.