A sus 84 años, Ringo Starr sigue siendo un ícono de frescura y talento. El exbaterista de The Beatles, conocido por su delgada figura, cabellera y barba negras, y sus inseparables gafas de sol, atribuye su longevidad a una dieta basada en brócoli, ejercicio regular y, sobre todo, a su pasión por la música.
En plena actividad, Ringo prepara una gira con su All Starr Band y lanza un nuevo álbum de estudio, Look Up, un tributo a su amor por el country. Este trabajo es su segunda incursión en el género, tras Beaucoups of Blues de 1970. Con colaboraciones como un dueto con Alison Krauss, el álbum es una mezcla de energía y melancolía que refleja su maestría y evolución artística.
Desde joven, Ringo sintió fascinación por el country, enamorándose de artistas como Willie Nelson y Waylon Jennings. Look Up nació casi por accidente, tras un encuentro con T Bone Burnett, quien no solo escribió canciones para el álbum, sino que también lo produjo. El resultado es un disco íntimo y relajado, con temas que exploran el amor, el tiempo y la gratitud, como la balada Time On My Hands y la dedicada a su esposa Barbara Bach, Thankful.
Casado con Barbara Bach por más de 40 años, Ringo destaca la simplicidad de su felicidad: “Me despierto cada mañana y pienso: ¡Qué bien que sigue aquí!”. Esa gratitud y energía positiva se reflejan en su música y en su actitud hacia la vida y el trabajo.
Desde sus inicios en Liverpool y Hamburgo hasta su establecimiento en California, Ringo ha construido una carrera inigualable, desde el frenesí de The Beatles hasta su éxito como solista. A través de los años, ha demostrado que ser baterista no solo es su trabajo soñado, sino también la base de su eterna juventud y vitalidad.
Con Look Up, Ringo Starr celebra la vida, la música y la pasión por crear, demostrando que la edad no es un límite cuando se vive con propósito y amor por lo que se hace.