El Congreso de Morelos destituyó el jueves por la tarde a Uriel Carmona Gándara como fiscal general del estado, con 16 votos a favor y 4 en contra. La decisión se tomó por faltas graves cometidas por Carmona, quien no cumplió con los requisitos de permanencia en el cargo. Además, estuvo vinculado a varios procesos legales por presuntos delitos relacionados con su trabajo.
La remoción de Carmona ocurrió horas después de que él mismo presentara una solicitud de desafuero contra el diputado federal y ex gobernador Cuauhtémoc Blanco. Blanco está siendo investigado por un presunto delito de violación en grado de tentativa. La solicitud de desafuero fue presentada en la Cámara de Diputados, lo que añadió controversia al contexto político del estado.
Destitución y nombramiento del nuevo fiscal
La destitución de Carmona Gándara se realizó en sesión ordinaria, a solicitud de la gobernadora Margarita González Saravia. La petición fue formalizada por Héctor Javier García, jefe de la oficina de la gubernatura, a la presidenta de la Mesa Directiva, Jazmín Solano. Tras la votación, Solano López anunció oficialmente la separación definitiva de Carmona del cargo de fiscal.
Poco después, el orden del día fue modificado para presentar una terna de candidatos para el nuevo fiscal general. La terna propuesta por la gobernadora incluyó a Leonel Díaz Rogel, Édgar Maldonado Ceballos y Fernando Blumenkron Escobar. Finalmente, Édgar Maldonado Ceballos, quien se desempeñaba como consejero jurídico de la mandataria, fue elegido de manera unánime para ocupar el puesto. Maldonado Ceballos asumirá el cargo por un periodo de nueve años.
Controversias y acusaciones contra Carmona
Durante su gestión, Carmona estuvo vinculado a varios procesos legales. Uno de los casos más mediáticos fue el de Ariadna Fernanda, cuyo fallecimiento en 2022 generó gran controversia. Carmona fue acusado de encubrimiento y feminicidio en su modalidad de auxiliador, aunque ganó los amparos en los juicios. Además, fue imputado por tortura en el caso de Luis Alberto N., conocido como “El Diablo”.
Tras su destitución, Carmona expresó que el Congreso local no cumplió con los procedimientos legales establecidos. Aseguró que no se le dio la oportunidad de defenderse, lo que calificó como un acto inconstitucional. Dijo que evaluaría posibles acciones legales para impugnar la decisión.
La destitución de Uriel Carmona marca un giro importante en la política de Morelos. La llegada de Édgar Maldonado Ceballos busca inaugurar una nueva etapa en la Fiscalía General, mientras se resuelven las controversias legales que rodean a Carmona.