El Barcelona consiguió una victoria épica ante el Benfica (0-1) en Lisboa, a pesar de jugar con diez jugadores desde el minuto 22. Un gol de Raphinha en la segunda mitad acercó a los azulgranas a los cuartos de final de la Champions League.
Un partido marcado por la expulsión
El encuentro comenzó con intensidad. El Benfica generó peligro con un remate de Akturkoglu; pero el arquero del Barcelona, Szczesny; respondió con una gran atajada. El equipo de Xavi controló la posesión con paciencia, buscando evitar las rápidas transiciones del equipo portugués.
Sin embargo, el partido cambió en el minuto 22. Pau Cubarsí fue expulsado tras derribar a Pavlidis en el borde del área. Esta decisión obligó al Barcelona a reestructurar su esquema. Ronald Araujo ingresó para reforzar la defensa, mientras que Dani Olmo salió del campo visiblemente frustrado.
A pesar de la inferioridad numérica, el Barcelona mantuvo la calma. Lamine Yamal y Raphinha fueron los más peligrosos en ataque; pero les faltó precisión en el último pase. Antes del descanso, Szczesny volvió a salvar a su equipo tras un cabezazo de Akturkoglu.
Raphinha decide el partido
El Benfica inició la segunda mitad con dominio total. Carreras y Schjelderup explotaron los espacios por la banda derecha del Barcelona; pero no lograron concretar. Pavlidis y Aursnes probaron desde fuera del área; pero Szczesny se mostró imbatible bajo los tres palos.
En el minuto 61; un error defensivo del Benfica permitió que Raphinha encontrara espacio en la frontal del área. El brasileño sacó un disparo cruzado que sorprendió a Trubin y puso el 0-1 en el marcador.
Con la ventaja; el Barcelona gestionó el partido con inteligencia. Pedri lideró el mediocampo y el equipo supo resistir los intentos del Benfica, que se mostró sin ideas en ataque. En los minutos finales; un penalti señalado sobre Belotti fue anulado por fuera de juego; y un potente disparo de Renato Sanches fue detenido por Szczesny.
Con este triunfo; el Barcelona da un paso importante hacia los cuartos de final y demuestra su solidez incluso en circunstancias adversas.