México enfrenta un nuevo brote de sarampión, enfermedad viral altamente contagiosa, con 43 casos confirmados hasta el momento, distribuidos principalmente en los estados de Chihuahua (39 casos) y Oaxaca (4 casos). La noticia fue dada a conocer el pasado 18 de marzo, durante la “Mañanera del Pueblo” por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien instó a la población a aplicar las medidas preventivas recomendadas por las autoridades de salud.
El Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) enfatiza la importancia de la vacunación como principal medida de prevención, tanto para niños como para adultos, ya que cualquier persona sin inmunización está en riesgo de contagio. Además, recomiendan tomar precauciones adicionales, como el lavado frecuente de manos y evitar el contacto cercano con personas enfermas, especialmente en áreas de mayor brote.
Ante la creciente preocupación por este brote, las autoridades sanitarias llaman a la población a vacunarse y seguir las recomendaciones para evitar la propagación del sarampión y proteger a los más vulnerables, como niños, adultos mayores y mujeres embarazadas.
El sarampión, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), se transmite a través de las gotículas de saliva, principalmente al expectorar o estornudar. Los síntomas más comunes incluyen fiebre alta, conjuntivitis, y manchas rojas en la piel, sin embargo en casos graves puede provocar complicaciones como ceguera o neumonía. Aunque la enfermedad tiene un tratamiento que permite la recuperación en tres semanas, es esencial su diagnóstico temprano para evitar complicaciones.

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