El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, exigió el retiro inmediato de un retrato suyo colgado en el Capitolio estatal de Colorado debido a que fue “desfigurado a propósito”.
El magnate no dudó en expresar su molestia y acusó al gobernador Jared Polis de estar detrás del “sabotaje”.
“Fue desfigurada a propósito hasta un punto que quizás ni siquiera yo haya visto antes”, escribió en Truth Social. En su publicación, adjuntó una foto del cuadro en cuestión, obra de la retratista Sarah Broadman.
“La artista también pintó al presidente Obama, y se ve maravilloso, pero la mía es realmente la peor. Debió haber perdido su talento con la edad”, añadió Trump.
Republicanos iniciaron campaña para retrato
Fue el Partido Republicano el que inició una campaña en 2018 para recaudar miles de dólares para que se pintara el retrato; este fue presentado y colgado en el Capitolio en Denver al año siguiente.
“En cualquier caso, preferiría no tener una pintura que tener esta; pero mucha gente de Colorado ha llamado y escrito para quejarse. ¡De hecho, están furiosos!”, prosiguió Trump.
“Apelo aquí en su nombre al gobernador de la izquierda radical, Jared Polis, quien tiene una postura extremadamente débil en materia de delincuencia, en particular con respecto al Tren de Aragua -banda criminal transnacional a la que Trump acusa de estar invadiendo el país-, que prácticamente se apoderó de Aurora (¡tranquilos, la salvamos!), para que la retire. ¡Jared debería estar avergonzado!”, concluyó el mensaje.
Un portavoz de Polis señaló que el gobernador “se sorprendió” por el hecho de que Trump sea un “gran aficionado a nuestro Capitolio estatal de Colorado y sus obras de arte”.
