El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, transfirió el control de tierras federales a lo largo de la frontera con México a las Fuerzas Armadas, como parte de sus acciones para resguardar su país.

La noche del viernes, el mandatario envió un memorando a cuatro jefes de agencias federales con la instrucción. Quienes recibieron lar orden fueron el secretario del Interior, Doug Burgum; a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem; al secretario de Defensa, Pete Hegseth; y a la secretaria de Agricultura, Brooke Rollins.

Tras la firma del documento, el Departamento de Defensa quedó facultado para asumir la jurisdicción de diversas tierras; sin embargo, las Reservas Indígenas Federales quedan expresamente excluidas.

Fuerzas Armadas fortalecerán muro

El objetivo de la nueva determinación es fortalecer el muro fronterizo, así como la instalación de tecnología de vigilancia.

Ahora, el secretario de Defensa tendrá la autoridad para determinar qué actividades militares son necesarias; también, podrá ampliar la aplicación del memorando a otros terrenos públicos según considere conveniente.

En caso de que algún migrante cruce esta área quedará puesta en “retención” por traspasar una propiedad militar. Es decir, las Fuerzas Armadas podrán detener a personas indocumentadas, pese a que se trata de una función de las fuerzas federales.

Al respecto, es importante señalar que las Fuerzas Armadas tienen prohibido llevar a cabo la aplicación de la ley doméstica bajo el mandato Posse Comitatus de 1878; sin embargo, al describir la zona como un área de “retención” el Departamento de Defensa podría eludir dicha ley.