En una conferencia de prensa, Alejandro Gertz Manero, titular de la Fiscalía General de la República (FGR), declaró que no existen pruebas que demuestren que el rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, haya sido utilizado como sitio de cremación. La declaración tuvo lugar el pasado lunes en la Ciudad de México.

Gertz Manero explicó que el inmueble está vinculado con actividades del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Funcionaba como un centro de reclutamiento y operación. Según el fiscal, esta información ha sido respaldada desde 2021 con pruebas testimoniales, documentales y periciales. También se cuenta con reportes de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Jalisco.

Análisis pericial descarta incineraciones

Para esclarecer los rumores sobre cremaciones, la FGR ordenó estudios periciales en el terreno. Se enviaron muestras de tierra, piedras y materiales de construcción a laboratorios de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Los resultados confirmaron que no se alcanzaron temperaturas superiores a los 200 grados Celsius, mientras que para realizar una cremación se requieren al menos 800 grados.

Durante los análisis se identificaron zanjas y restos de fogatas, además de una pequeña vasija con fragmentos óseos antiguos. Sin embargo, las pruebas no respaldan la versión de que el rancho haya sido un campo de exterminio.

Presión social por crisis de desapariciones

El colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco señaló públicamente este sitio el pasado 8 de marzo. El hallazgo de al menos 400 pares de zapatos encendió las alarmas. Aunque el Gobierno mexicano lo identifica como un centro de adiestramiento, las familias de personas desaparecidas exigen acciones claras ante la crisis humanitaria.

En México hay más de 120 mil personas no localizadas desde la década de 1960. Esta situación ha aumentado la presión sobre las autoridades, incluida la presidenta Claudia Sheinbaum.

Nuevas líneas de investigación

El fiscal Gertz Manero aseguró que se mantiene activa una línea de investigación para identificar otros inmuebles posiblemente vinculados al crimen organizado. El rancho Izaguirre continúa bajo revisión por peritos, policías y ministerios públicos de la FGR.