Iván Morales Corrales, exsuboficial de la extinta Policía Federal y uno de los sobrevivientes del ataque en el que el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) derribó un helicóptero militar durante un operativo para capturar a Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, fue asesinado en Temixco, Morelos.

Los hechos ocurrieron la mañana del 30 de abril, en el fraccionamiento Las Brisas. Se sabe que sujetos armados interceptaron la camioneta negra en la que viajaba junto a una mujer.
Presuntamente, los agresores circulaban en una camioneta Urban blanca. Con esta, bloquearon el paso al vehículo de Iván Morales y comenzaron a dispararle. De acuerdo con las indagatorias, los responsables abrieron fuego contra el expolicía en al menos 15 ocasiones.

Tras el ataque, ambas víctimas perecieron en el sitio, confirmaron las autoridades. Los cuerpos fueron trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo) para la necropsia correspondiente.

Hasta el momento, no hay un móvil del ataque confirmado; sin embargo, se presume que habría sido una venganza ligada a su trayectoria como exagente federal.

Fallida operación ocurrió hace 10 años

Es importante señalar que la fallida operación para capturar a “El Mencho” ocurrió el 1 de mayo de 2015; estuvo a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional. Ese día, con convoy de fuerzas especiales se movilizó hacia Villa Purificación, en la región Costa Sur de Jalisco, donde presuntamente estaba el capo.

En el operativo participaron tres helicópteros, entre ellos un Cougar con matrícula 1009. Allí viajaban 18 elementos, entre personal militar y agentes federales. Uno de los viajeros era Iván Morales, suboficial de la Policía Federal.

Pese a que se trató de un operativo altamente confidencial, fueron sorprendidos por una ofensiva violenta. Los sicarios del CJNG, preparados para repeler el operativo, emplearon armamento de guerra, incluyendo una ametralladora pesada Brownning MP y un lanzacohees RPG-7 diseñado para destruir tanques.

Dos granadas alcanzaron la aeronave donde viajaban Iván y dañaron el rotor. De inmediato, el helicóptero comenzó a caer, pero el piloto maniobró para planearlo. Tras bajar, el oficial estaba ardiendo. Sufrió quemaduras en el 70 por ciento de su cuerpo, pero luchó por recuperase debido a que su hijo estaba a punto de nacer.