Ovidio Guzmán acepta su culpabilidad ante la justicia de EE.UU.
Ovidio Guzmán, narcotráfico y acuerdo judicial marcan el nuevo giro en el caso del hijo de Joaquín “El Chapo” Guzmán. Este lunes, Ovidio Guzmán, conocido como “El Ratón”, se declaró culpable ante una jueza en Chicago, Illinois.
La declaración incluye cargos por narcotráfico y asociación delictuosa, en el marco de un acuerdo judicial con la fiscalía estadounidense.
El proceso judicial contra el exlíder de “Los Chapitos”, facción del Cártel de Sinaloa, ha estado rodeado de tensiones políticas y legales. Estados Unidos había solicitado la cadena perpetua para Guzmán López, pero el acuerdo judicial cambiaría ese escenario.
Como parte del trato, Ovidio Guzmán renunció a su derecho a juicio a cambio de beneficios procesales.
La audiencia final, programada para el 9 de julio de 2025, podría cancelarse tras esta admisión de culpabilidad. La fecha había sido aplazada varias veces, mientras se negociaban los términos entre la defensa y las autoridades.
El pacto abre puertas a cooperación con la justicia
Según fuentes judiciales, el acuerdo judicial incluye la posibilidad de que Ovidio Guzmán coopere como testigo en otros casos. Esto permitiría a las autoridades estadounidenses avanzar en investigaciones contra otros miembros del narcotráfico organizado.
En compensación, su condena podría reducirse sustancialmente, alejándose de la cadena perpetua inicialmente solicitada.
Ovidio Guzmán se encuentra detenido en una prisión federal de máxima seguridad en el estado de Illinois. Su extradición desde México en 2023 fue un proceso complejo y altamente mediático, marcado por operativos militares.
Su figura cobró relevancia tras la captura fallida de 2019 en Culiacán, conocida como el «Culiacanazo».
El Departamento de Justicia aún no confirma los términos completos del acuerdo, pero se espera un anuncio oficial en las próximas semanas.
El caso de Ovidio Guzmán representa un golpe simbólico y estratégico para las estructuras del narcotráfico trasnacional.
Por ahora, el foco está puesto en cómo esta colaboración afectará futuros procesos judiciales y posibles represalias del crimen organizado. La historia de Ovidio Guzmán continúa, ahora desde los estrados judiciales de Estados Unidos y bajo la lupa internacional.