Claudia Sheinbaum, presidenta de México, anunció este jueves que invitará al nuevo papa, León XIV, a visitar el país. La declaración se dio durante su participación en la conferencia matutina realizada en Palacio Nacional.

La mandataria felicitó públicamente a Robert Francis Prevost Martínez, quien fue elegido como el nuevo pontífice tras dos días de cónclave en el Vaticano. La misa de inicio de su pontificado está programada para el 18 de mayo, aunque Sheinbaum anticipó que es poco probable que asista personalmente al evento.

Un nuevo papa con visión social

Durante su intervención, Sheinbaum destacó que León XIV tiene una orientación enfocada en las personas más vulnerables y comprometida con la paz y la prosperidad mundial. En ese sentido, subrayó la importancia de que el nuevo líder del Vaticano dé continuidad al legado del papa Francisco.

“Sabemos que es una persona con una orientación hacia los pobres y eso es muy bueno… va a estar atento a las necesidades de quien menos tiene”, expresó la presidenta.

Una invitación abierta

Sheinbaum mencionó que aún no hay una fecha concreta para la visita, pero aseguró que se le hará llegar una invitación formal al nuevo pontífice para que venga a México.

Por otro lado, explicó que aún no está definido si algún representante del Gobierno mexicano acudirá a la ceremonia en el Vaticano. Mencionó a Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Gobernación, como posible representante oficial.

León XIV y el cónclave

León XIV tiene 69 años y nació en Chicago. Fue electo como el papa número 267 en la historia de la Iglesia católica. Sucede al papa Francisco, quien falleció el 21 de abril de 2025 a los 88 años.

El cónclave que eligió a Prevost reunió a 133 cardenales de todo el mundo. Entre ellos, participaron dos mexicanos: Francisco Robles Ortega, arzobispo de Guadalajara, y Carlos Aguiar Retes, arzobispo primado de México.

México, país clave para la Iglesia

México ocupa el segundo lugar en número de fieles católicos a nivel mundial,; con alrededor de 111 millones de creyentes, solo detrás de Brasil. Esta relevancia refuerza el interés por estrechar los lazos con el nuevo liderazgo del Vaticano.