Las nuevas advertencias del Consulado General de Estados Unidos en Ciudad Juárez sobre sanciones para quienes busquen ingresar al país con fines de «turismo de parto» han llevado a muchas mujeres embarazadas a reconsiderar sus planes de dar a luz en territorio estadounidense.
Históricamente, mujeres mexicanas cruzaban a El Paso, Texas, para tener a sus hijos y así asegurarles la ciudadanía estadounidense. Sin embargo, tras los recientes anuncios, clínicas en Ciudad Juárez, como la unidad médica “Todos Somos Mexicanos”, han notado un cambio en las decisiones de sus pacientes.
“La mayoría ya tenía todo listo para cruzar y parir en EE.UU., pero ahora han optado por quedarse y dar a luz aquí”, explicó la doctora Karen Garza, encargada del control prenatal en esa institución. Según ella, ha habido un aumento en la atención prenatal local, reflejo del temor a las nuevas restricciones.
A través de sus redes sociales, el consulado estadounidense reiteró su intención de rechazar visados a quienes tengan como propósito principal tener a sus hijos en Estados Unidos para obtenerles la ciudadanía. «Si un solicitante intenta usar una visa de turista con ese fin, será rechazado», advirtieron.
Desde finales del año pasado, la cantidad de mujeres embarazadas migrantes que buscan atención médica ha disminuido en un 60%, una reducción que, según Garza, puede atribuirse tanto a las restricciones migratorias como a una menor movilidad en la región.
Activistas locales han criticado la medida por considerar que vulnera derechos humanos y rompe con la dinámica histórica entre Ciudad Juárez y El Paso. «Era una práctica común en la frontera. Ahora se castiga y eso es preocupante», comentó un defensor de derechos que pidió no ser identificado.
El padre Javier Calvillo, exdirector de la Casa del Migrante, advirtió que esta política puede afectar a mujeres en situación vulnerable que no planearon dar a luz en EE.UU., pero que enfrentan emergencias médicas en su camino migrante. “No siempre es una elección; a veces es una necesidad urgente de atención”, expresó.
Ante este panorama, hospitales y centros médicos de Ciudad Juárez ya se están preparando para recibir a más mujeres en trabajo de parto. “Muchas ya han dicho abiertamente que decidieron tener a sus hijos aquí en México debido a los cambios en EE.UU.”, confirmó nuevamente la doctora Garza.
Este giro en las políticas migratorias estadounidenses marca una nueva etapa en la histórica relación fronteriza entre Ciudad Juárez y El Paso, ahora atravesada por mayores restricciones bajo la administración del presidente Donald Trump.