El pasado 23 de mayo, autoridades estatales y municipales localizaron 17 cuerpos sin vida en un predio abandonado de Irapuato, durante un operativo conjunto coordinado por la Fiscalía General del Estado de Guanajuato (FGE). El hallazgo fue resultado de trabajos de inteligencia realizados en la zona.

Los cuerpos —11 hombres, 2 mujeres y 3 sin identificar por el estado de descomposición— fueron encontrados en distintas zonas del terreno. Además, se recuperaron restos óseos pertenecientes a una persona más, cuya identidad y sexo aún no han sido determinados.

Investigaciones forenses y avances en identificación

Las autoridades informaron que, hasta el momento, cinco de las personas han sido identificadas. Se trata de cuatro hombres y una mujer que figuraban en reportes de personas desaparecidas. Los restos restantes fueron trasladados al laboratorio forense para continuar con las pruebas de identificación.

El equipo forense sigue explorando el área. No se descarta que puedan hallarse más restos humanos durante los trabajos de prospección.

Evidencias halladas en el lugar

Durante el operativo, también se aseguraron diversas herramientas y prendas: cuatro cuchillos, cinco machetes, dos picos, cuatro palas, ropa y calzado. Estos elementos están siendo analizados para determinar su relevancia en el caso y su posible vínculo con los cuerpos encontrados.

Posibles conexiones

Este hallazgo ha traído a la memoria lo ocurrido en el “Rancho Izaguirre”, en Teuchitlán, Jalisco. En ese lugar se descubrió un campo clandestino vinculado a desapariciones forzadas. Aunque los casos no son idénticos, presentan similitudes que reavivan el debate sobre la violencia organizada en distintas regiones del país.