La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, declaró que su gobierno insistirá en la extradición de Dámaso López Serrano, alias “El Mini Lic”, pese a que el narcotraficante alcanzó un acuerdo judicial en Estados Unidos, donde se declaró culpable por tráfico de fentanilo.

Las declaraciones se dieron durante la conferencia matutina del jueves, un día después de que López Serrano admitiera su responsabilidad ante una corte federal. Sheinbaum expresó su inconformidad con las autoridades estadounidenses por negociar con miembros del crimen organizado, mientras México continúa solicitando la entrega del exlíder del Cártel de Sinaloa.

Critican doble discurso de EE.UU.

La mandataria recordó que Estados Unidos ha declarado como terroristas a algunas organizaciones criminales, y ha manifestado públicamente que no negocia con estos grupos. Por ello, exigió una explicación sobre el caso de López Serrano y otros similares.

“Es importante que haya una explicación sobre esto”, insistió Sheinbaum. Subrayó además que su gobierno coopera diariamente con tareas de inteligencia, investigación y detenciones para mantener la paz y combatir la violencia ligada al crimen organizado.

¿Quién es “El Mini Lic”?

Dámaso López Serrano fue capturado por segunda vez en diciembre de 2024 en Virginia. Su primera detención ocurrió en 2017, cuando se entregó voluntariamente a las autoridades estadounidenses y, tras cumplir cinco años en prisión, fue liberado en 2022 bajo libertad condicional como informante.

Además de sus delitos relacionados con narcotráfico, López Serrano ha sido acusado de ordenar el asesinato del periodista Javier Valdez en 2017. Desde su colaboración con EE. UU., ha proporcionado información clave sobre el funcionamiento interno del Cártel de Sinaloa.

Conflicto dentro del Cártel de Sinaloa

En septiembre de 2024 comenzó una pugna interna en el Cártel de Sinaloa entre dos facciones: “Los Chapitos” y “Los Mayos”. Este conflicto ha generado más de mil muertes en el estado. La tensión aumentó tras la detención de Ismael “El Mayo” Zambada en julio de ese año, presuntamente entregado por Joaquín Guzmán López, hijo de “El Chapo”.

López Serrano ha hablado públicamente sobre esta división, marcando sus diferencias con “Los Chapitos” por el control de rutas y operaciones del cártel.