Un tributo eterno en Wolverhampton

Diogo Jota, exjugador del club inglés Wolves, ha sido inducido al Salón de la Fama del equipo. La decisión fue tomada de forma unánime por el comité dirigido por la leyenda John Richards. La noticia llega poco después de la trágica muerte del jugador portugués y su hermano André en un accidente en España. El club decidió rendirle homenaje de forma excepcional.

La inclusión de Jota no fue común. Suele tomarse tiempo para definir nuevas figuras en el museo del club. En este caso, el impacto emocional aceleró la decisión. El legado de Diogo Jota fue clave para hacerlo parte de la historia.

Durante su paso por los Wolves, Jota fue un referente en el ataque. Su estilo de juego y compromiso conquistaron a la afición del Molineux Stadium. La comunidad aún lamenta profundamente su partida. Su memoria vive ahora en el sitio más ilustre del club inglés.

Fuera del estadio, los homenajes no cesan. Hinchas colocaron fotografías, camisetas y recuerdos para honrar su figura. El cariño que despierta Jota trasciende las fronteras del club y del país. Wolves ha sellado su historia con un homenaje imborrable.

Homenaje que trasciende el fútbol

El reconocimiento a Diogo Jota no quedó solo en Wolverhampton. En Liverpool, ciudad donde también jugó, le dedicaron un mural con el mensaje «Forever 20». La obra, pintada en Sybil Road, cerca de Anfield, refleja el afecto de los aficionados. Cientos de personas han dejado mensajes escritos en el mural.

El dorsal 20 de Jota se ha convertido en símbolo de respeto y memoria. Aficionados de varios equipos, no solo del Liverpool, han rendido tributo. Kevin Gates, artista conocido como ‘Kop Artist’, dejó su firma en la pintura. Paul Curtis, otro artista local, lanzó una campaña de recaudación.

Ya se han reunido más de 25,000 libras, con donaciones de todo el mundo. El impacto de Diogo Jota fue global, cruzando rivalidades y naciones. Fue más que un futbolista: una figura que conmovió con su carácter y talento. Wolves, con este homenaje, le ha dado un lugar eterno en su historia.

El fútbol despide a un jugador brillante y a una persona inolvidable. El legado de Diogo Jota permanece vivo en la memoria de sus clubes y su gente. Su nombre está inscrito para siempre en el corazón del deporte. Una leyenda que vivirá más allá del campo de juego.