Tras un estudio reciente que revela una disminución sostenida en las tasas de natalidad y un envejecimiento poblacional ya presente, la Iglesia católica de México expresó su preocupación por la profunda y silenciosa transformación demográfica que enfrenta Latinoamérica.

Este fenómeno fue identificado a través del informe ‘Cambios en las estructuras demográficas’, elaborado por la Red de Institutos Universitarios Latinoamericanos de Familia. Además, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) reportó que en 2024 la población de la región alcanzó 663 millones, cifra menor a la proyectada en 2000.

Impacto en la estructura familiar y social

El estudio destaca que, además del envejecimiento, aumentan los divorcios y crecen los hogares unipersonales en la región. La Iglesia subraya que estos cambios no solo afectan las estadísticas, sino que transforman la vida cotidiana y las relaciones humanas.

De acuerdo con la investigación, varios países latinoamericanos registran ya más fallecimientos que nacimientos. Esto genera una población envejecida sin relevo generacional suficiente y con vínculos familiares cada vez más frágiles.

Propuestas de la Iglesia para enfrentar la transición demográfica

Ante esta realidad, la Iglesia mexicana solicita que las políticas públicas reconozcan a la familia como una prioridad social. Recomiendan promover la vida, acompañar la maternidad y paternidad responsables, y proteger a los adultos mayores sin aislarlos.

También enfatizan la importancia de fomentar la conciliación familiar y fortalecer los lazos intergeneracionales. Según la institución, la prevención de la pobreza, la salud mental,; la educación integral y la inclusión digital deben nutrirse de la familia.