El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este miércoles el decreto para aplicar aranceles del 50 por ciento a las importaciones de cobre bajo el argumento de “seguridad nacional”.
Los gravámenes incluyen a productos de cobre semiacabados; también a los derivados con uso intensivo de cobre. Estos entrarán en vigor a partir del 1 de agosto.
De acuerdo con la nueva orden, los aranceles excluirán la chatarra de cobre y los materiales de insumo, como minerales, concentrados, matas, cátodos y ánodos. Además, incluye la exigencia de que el 25 por ciento de la chatarra de alta calidad producida en Estados Unidos también se venda dentro del país.
Aranceles, para proteger la industria
Esto, después de una investigación que el presidente estadounidense, Donald Trump, ordenó en febrero. Al igual que los impuestos al acero y aluminio, se busca impulsar la industria nacional, así como abordar los “desequilibrios comerciales”.
Tras el anuncio, los precios del metal cayeron hasta 18 por ciento; esto, pese a que gran parte del mercado estadounidense había anticipado algún tipo de arancel sobre el cobre. Y es que esta materia prima es indispensable para el cableado y otros productos de la industria de la construcción.
Cabe mencionar que la noticia se da dos días antes de la entrada en vigor de los aranceles recíprocos; el 1 de agosto, la mayoría de los países tendrán impuestos si desean llevar sus productos al mercado estadounidense.