El Ministerio de Salud de Ecuador confirmó la muerte de 12 recién nacidos en el Hospital Universitario de Guayaquil, lo que desató una ola de inconformidad contra el sistema de salud pública del país.

De acuerdo con las primeras indagatorias, el fallecimiento de los menores se debió a una peligrosa bacteria, así como a la falta de medicamentos y de vitaminas esenciales para su tratamiento y prevención.

Sin embargo, en un primer momento, las autoridades sanitarias señalaron que las muertes se debieron a “causas multifactoriales”. Además, informaron que solo dos de los bebés perecieron a causa de una infección por Klebsiella pneumoniae productora de carbapenemasa.

Según el Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, esta bacteria es altamente resistente a los fármacos; también presenta una elevada morbilidad y mortalidad. Al respecto, el gerente del hospital, Hugo Hernández, indicó que se ha instalado un centro epidemiológico para prevenir nuevos casos.

Familias acusan irregularidades

En contraste, las familias denunciaron una escasez de insumos médicos, situación que relacionan con el brote bacteriano.

Ante ello, el Ministerio de Salud aseguró que se están realizando pruebas para identificar con precisión el tipo de bacteria involucrada; así como la aplicación de protocolos de desinfección y control en las áreas críticas del hospital.

Hasta el momento, al menos dos altos cargos del nosocomio han sido destituidos; sin embargo, la investigación continúa para determinar responsabilidades administrativas y penales.

Por su parte, la Agencia de Aseguramiento de la Calidad de los Servicios de Salud y Medicina Prepagada (ACESS) informó que llevará a cabo un proceso de auditoría médica en el Hospital Universitario de Guayaquil.