El Tribunal Superior de Bogotá, Colombia, ordenó la liberación inmediata del expresidente Álvaro Uribe, sentenciado a 12 años de prisión domiciliaria por fraude procesal y soborno.

La tarde del martes, un juez revocó la detención domiciliaria hasta que se resuelva una apelación impuesta por el exmandatario.

Ahora, Álvaro Uribe podrá continuar su proceso en libertad, hasta que se defina esta segunda instancia.

A inicios de agosto, la jueza Sandra Liliana Heredia condenó al expresidente tras hallarlo culpable de dos delitos. Esto lo convirtió en el primer exmandatario sentenciado en la historia del país sudamericano.

Ante esto, la defensa del político apeló el fallo, argumentando “errores de hecho y de derecho”, “apreciaciones notoriamente sesgadas” y “vicios insubsanables”.

La segunda instancia tiene hasta el 16 de octubre para ratificar la condena o revocarla y absolver a Uribe. Si excede la fecha, el proceso será archivado.

Así fue la captura de Álvaro Uribe

Cabe recordar que todo empezó en 2012, cuando el expresidente denunció al senador de izquierda Iván Cepeda; esto por un supuesto complot para vincularlo con paramilitares. Según el legislador, exparamilitares en prisión lo habían señalado de fundar escuadrones antiguerrillas en la finca de su familia.

En 2018, la Corte Suprema lo empezó a investigar por dichas acusaciones, que finalmente concluyeron en su captura.

Álvaro Uribe llegó al poder cuando Colombia ardía por el enfrentamiento entre guerrillas de izquierda, escuadrones de ultraderecha y fuerzas del Estado. Por ello, su política se enfocó en doblegar a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Pero, al tiempo que mejoró la percepción de seguridad, su gobierno fue cuestionado por miles de asesinatos cometidos por militares durante la lucha contra los rebeldes.