Fotografías de ciervos con bultos inusuales en la piel se viralizaron en redes sociales, generando preocupación entre usuarios. Las imágenes, difundidas en plataformas como Facebook y X, mostraban animales con grandes crecimientos en la cabeza, extremidades y cuerpo.

Expertos aclararon que se trata de fibromas cutáneos, una afección benigna provocada por un papilomavirus específico de los ciervos. Esta condición no representa riesgo para personas, mascotas ni otras especies silvestres o domésticas.

¿Qué son los fibromas cutáneos?

Los fibromas son tumores benignos que pueden variar de tamaño —desde el de una arveja hasta una pelota— y aparecen principalmente en la piel sin pelo. Aunque su aspecto es alarmante, la mayoría se cae de manera natural sin necesidad de intervención médica.

La enfermedad ha sido registrada en diversos estados del país, incluyendo Nueva York, Pensilvania y Wisconsin, y también se han detectado casos en conejos y ardillas.

Cómo se transmite la enfermedad

La principal vía de contagio es a través de insectos hematófagos como mosquitos y garrapatas, especialmente activos durante el verano. El contacto entre ciervos en áreas de descanso o alimentación, y la fricción de astas contra árboles durante la temporada de apareamiento, también pueden facilitar la propagación.

Según la veterinaria Kristin Mansfield, la infección suele ser controlada por el sistema inmune de los animales, por lo que rara vez ocasiona complicaciones graves.

¿Hay riesgo para humanos?

Diversos organismos oficiales —como el Departamento de Pesca y Vida Silvestre de Maine y el Departamento de Conservación Ambiental de Nueva York— confirmaron que no existe peligro para humanos ni animales domésticos. Incluso, si se respetan prácticas básicas de higiene y cocción, la carne de ciervo infectado es segura para el consumo.

La Universidad Estatal de Mississippi precisó que los tumores solo afectan la piel, sin comprometer músculos u órganos internos.

Un fenómeno recurrente amplificado por redes sociales

Las autoridades de Pensilvania y Wisconsin señalaron que no hay evidencia de un aumento significativo en los casos durante 2025. Esta condición es común cada año durante la temporada de caza y reproducción.

El fenómeno ha ganado visibilidad por la rápida circulación de imágenes y mensajes alarmistas en redes sociales, generando una percepción distorsionada de crisis sanitaria.

Otros animales también pueden verse afectados

Al igual que los ciervos, especies como ardillas y conejos pueden desarrollar fibromas o crecimientos similares, causados por virus específicos. El Shope papilomavirus, por ejemplo, provoca protuberancias que parecen “cuernos” en conejos, sin representar riesgos para otras especies.

Investigaciones sobre estas enfermedades en fauna silvestre estadounidense datan de la década de 1950, aunque el cambio climático ha favorecido la expansión de los insectos vectores.