Un total de 66 cuerpos fueron localizados en fosas clandestinas en un predio cercano a la carretera La Paz–San Juan de la Costa, en Baja California Sur. El hallazgo fue confirmado por el colectivo Búsqueda X La Paz, que realizó labores de rastreo durante una semana. El lugar es considerado un punto crítico por su historial delictivo.
El descubrimiento reabre la discusión sobre la crisis de desapariciones en la entidad, mientras continúan los trabajos de identificación forense por parte de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). En un encuentro reciente, diez familias lograron reconocer a sus seres queridos entre los restos, poniendo fin a años de búsqueda.
Un cementerio clandestino en medio del desierto
El predio ha sido señalado en múltiples ocasiones como un sitio de inhumación ilegal. La zona fue asegurada por personal de la PGJE, que llevó a cabo inspecciones, exhumaciones y recolección de evidencias. Hasta ahora, se han encontrado cinco nuevas fosas dentro del mismo terreno.
Integrantes del colectivo entregaron camisetas con la frase “Promesa cumplida” a las familias que lograron identificar a sus familiares desaparecidos. Para ellas, este hallazgo representó un cierre doloroso pero necesario.
PGJE continúa con investigaciones e identificación
Aunque se confirmó la cifra de 66 cuerpos hallados, la PGJE aún no ha emitido un informe final sobre el número exacto de víctimas identificadas, ni sobre el periodo en que pudieron haber ocurrido las inhumaciones. Los restos están siendo procesados para establecer coincidencias con reportes de desapariciones en el estado.
Las autoridades mantienen abiertas las líneas de investigación para dar con los responsables de las fosas y esclarecer las circunstancias de los decesos. Organismos civiles han pedido que estos casos no queden impunes y que se refuercen las acciones para frenar el impacto del crimen organizado.
Urgen medidas para enfrentar la crisis
El hallazgo ha generado preocupación entre colectivos y defensores de derechos humanos, quienes insisten en la necesidad de fortalecer los mecanismos de búsqueda y atención a víctimas. También llaman a una respuesta institucional contundente ante la violencia que sigue afectando a comunidades enteras en Baja California Sur.