El Ejército de Israel declaró a la Ciudad de Gaza como “zona de combate peligrosa” tras recuperar el cuerpo de dos rehenes. En ese contexto, anunció que no habrá más pausas tácticas y continuará los bombardeos.
Lo anterior ocurrió tras dos semanas de treguas parciales por motivos humanitarios; las pausas, de hasta diez horas, buscaban permitir el ingreso de ayuda ante la crisis humanitaria en el enclave.
Sin embargo, ahora el gobierno israelí aprobó la ocupación total de la ciudad; además, informó que no habrá distribución de ayuda en la zona. Lo anterior obligó a miles de civiles a huir para encontrar comida y refugio.
Bombardeos en la ciudad
El ejército ya bombardea los barrios periféricos de la ciudad, como parte del plan previo a un asalto directo al centro urbano.
Según el Ministerio de Salud palestino, los ataques han empujado a la población hacia el interior de Gaza; allí la densidad ya supera las 60 mil personas por kilómetro cuadrado.
Un video mostró la destrucción en Jabalya, al norte de Gaza. Faris Afaneh, jefe de emergencias locales, denunció bombardeos con drones, explosivos y artillería. Los calificó como parte de “una campaña masiva y sin precedentes”.
El jueves, el ejército israelí lanzó panfletos desde drones. Ordenaban a la población evacuar hacia el sur. Quienes se quedan enfrentan nuevos ataques. “Hace una hora lanzaron 50 bombas en plazas”, dijo un residente.
Por su parte, las cifras siguen en aumento. El Ministerio de Salud de Palestina reportó ya 63 mil 25 muertos y más de 159 mil heridos desde el inicio del conflicto. Además, persiste la hambruna; por ello, muchos niños han fallecido de desnutrición.
Cabe mencionar que aún permanecen 48 rehenes en Gaza. Se cree que al menos 20 siguen con vida.