Ismael Ayala Uribe, un mexicano que estaba bajo custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) falleció debido a que le negaron atención sanitaria mientras estaba recluido en en el centro de detención de Adelanto, California. Por ello, el gobierno de México envió una nota diplomática a Estados Unidos para exigir una investigación exhaustiva por el caso.

El martes, ICE comunicó que el hombre de 39 años murió en el Centro Médico Global en Victorville, California, a las 2:32 horas del 22 de septiembre.

Explicó que Ismael fue evaluado por un médico de guardia desde el 18 de septiembre, tras comunicar que se sentía mal; posteriormente, lo devolvieron a su dormitorio. Sin embargo, para el 21 del mes lo enviaron al nosocomio, donde tenía programada una cirugía para extirparle un absceso en el glúteo.

Sin embargo, comenzó a presentar taquicardia anormal y, aunque los médicos trataron de salvarle la vida, Ayala no respondió y finalmente falleció.

Familia acusa negligencia médica

La familia del ahora fallecido acusó que, desde que lo detuvieron, Ismael comenzó a tener problemas de salud.

“Me decía: ‘mami, ya no aguanto, me siento muy mal’. Le dije, pídeles por favor que te atiendan”, relató Lucía Ayala, madre del ahora occiso.

También acusó que Ismael solo recibió Tylenol en el centro de detención, lo que le ayudaba con la fiebre; pero no con la infección.

“No supimos ni siquiera en qué hospital lo habían llevado. Nos enteramos ya que había fallecido”, dijo su madre al tiempo de exigir justicia.

Ismael fue parte del DACA

Ismael ingresó a Estados Unidos en fecha y lugar desconocidos; pero para 2012 ingresó al programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA).

En septiembre del 2015, fue declarado culpable de conducir bajo la influencia del alcohol; por ello, lo sentenciaron a tres años de libertad condicional.

En 2016, el Servicio de Ciudadanía e Inmigración de Estados Unidos denegó su solicitud de renovación de DACA. Mientras que, en 2019, fue declarado culpable de un segundo caso de conducir bajo la influencia de estupefacientes; por ello, lo sentenciaron a 120 días de cárcel y cinco años de libertad condicional.

A mediados de agosto, fue detenido en su centro de trabajo, un lavado de autos en Huntington Beach.

Tras la noticia, este miércoles, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció que ya envió una nota diplomática al país vecino del norte para pedir que realice todas las investigaciones pertinentes sobre el caso.