En la Ciudad de México, madres, padres y familiares de los 43 estudiantes de Ayotzinapa encabezaron la marcha conmemorativa, que forma parte de la jornada “Ayotzinapa: 11 años de luces y sombras”, con el objetivo de exigir avances en las investigaciones y respuestas claras por parte del Gobierno federal. Manifestaciones similares se realizan en otros estados, como Chiapas, Oaxaca y Estado de México.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México (SSC-CDMX) informó que la movilización inició a las 16:00 horas desde el Ángel de la Independencia, recorriendo Paseo de la Reforma, avenida Juárez y Eje Central, para concluir en el Zócalo capitalino.
Durante la jornada, familiares de los normalistas intensificaron sus protestas. Frente al Campo Militar Marte, los manifestantes incendiaron un camión, rompieron una puerta y lanzaron petardos. En las calles 5 de Mayo y Palma colocaron barricadas de concreto, aunque algunos padres ingresaron por huecos hacia el Zócalo.
El personal de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM) mantiene un operativo de acompañamiento y monitoreo de la marcha.
Mientras los manifestantes avanzaban sobre Paseo de la Reforma, se reportó un incendio en una cortina del edificio de la Secretaría del Bienestar, ubicado en la calle Budapest, colonia Juárez. Además, se registraron actos de vandalismo en el edificio de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
La principal demanda de la jornada es que el Ejército entregue los más de 800 folios relacionados con el caso, investigar la detención de 17 jóvenes en Iguala la noche del 26 de septiembre de 2014, revisar los registros de telefonía celular de los estudiantes y continuar con las extradiciones de exfuncionarios implicados. Asimismo, exigen profundizar las pesquisas contra autoridades de Guerrero que habrían encubierto los hechos.
En otras ciudades, como Morelia, Michoacán, estudiantes michoacanos se manifestaron frente a Palacio de Gobierno para exigir justicia.
Antecedentes del caso
El 26 de septiembre de 2014, un contingente de estudiantes de la Escuela Normal Rural de Ayotzinapa se dirigía a Iguala para retener autobuses de transporte público con el fin de trasladarse días después a la Ciudad de México y participar en la conmemoración de la Matanza de Tlatelolco de 1968. Durante el trayecto, los normalistas fueron interceptados y agredidos por elementos de la Policía Municipal de Iguala y otras corporaciones de seguridad. El saldo fue de seis personas fallecidas, entre ellas tres estudiantes; alrededor de 40 lesionados; y 43 desaparecidos.
Los 43 normalistas desaparecidos
- Abel García Hernández – 20 años
- Abelardo Vázquez Penitén – 19 años
- Adán Abrajan De la Cruz – 24 años
- Antonio Santana Maestro – 20 años
- Alexander Mora Venancio – 21 años
- Benjamín Ascencio Bautista – 19 años
- Bernardo Flores Alcaraz – 21 años
- Carlos Iván Ramírez Villarreal – 20 años
- Carlos Lorenzo Hernández Muñoz – 19 años
- César Manuel González Hernández – 21 años
- Cristián Alfonso Rodríguez Telumbre – 21 años
- Cristián Tomás Colón Garnica – 18 años
- Cutberto Ortiz Ramos – 22 años
- Dorian González Parral – 19 años
- Emiliano Gaspar de la Cruz – 23 años
- Everardo Rodríguez Bello – 21 años
- Felipe Arnulfo Rosas – 20 años
- Giovanni Galíndez Guerrero – 20 años
- Israel Caballero Sánchez – 21 años
- Israel Jacinto Lugardo – 19 años
- Jesús Giovanni Rodríguez – 21 años
- Jhosivanni Guerrero De la Cruz – 20 años
- Jonás Trujillo González – 20 años
- Jorge Álvarez Nava – 19 años
- Jorge Aníbal Cruz Mendoza – 19 años
- Jorge Antonio Tizapa Leguideño – 20 años
- Jorge Luis González Parral – 21 años
- José Ángel Campos Cantor – 33 años
- José Ángel Navarrete González – 18 años
- José Eduardo Bartolo Tlatempa – 17 años
- José Luis Luna Torres – 20 años
- Julio César López Patoltzin – 25 años
- Leonel Castro Abarca – 19 años
- Luis Ángel Abarca – 18 años
- Luis Ángel Francisco Arzola – 20 años
- Magdaleno Rubén Lauro Villegas – 19 años
- Marcial Pablo Baranda – 20 años
- Marco Antonio Gómez Molina – 21 años
- Martín Sánchez García – 20 años
- Mauricio Ortega Valerio – 18 años
- Miguel Ángel Hernández Martínez – 27 años
- Miguel Ángel Mendoza Zacarías – 23 años
- Saúl Bruno García – 18 años
La jornada del 26 de septiembre reafirma la exigencia de justicia y verdad sobre uno de los casos más emblemáticos de desaparición forzada en México.