Un juez federal en Hermosillo, Sonora, vinculó a proceso a Juan Pablo Vargas Báez, alias “El Chuki”, identificado como piloto del Cártel de Sinaloa, específicamente del grupo de Los Chapitos. La Fiscalía General de la República (FGR) informó que el acusado enfrenta cargos por delincuencia organizada relacionados con el tráfico y la fabricación ilegal de armas de fuego.
La detención ocurrió en Badiraguato, Sinaloa, tras cumplirse una orden de aprehensión ejecutada por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana. Posteriormente, el imputado fue trasladado al Centro Federal de Readaptación Social (CEFERESO) número 11, donde permanecerá bajo prisión preventiva mientras avanza el proceso judicial.
De acuerdo con medios locales, este expediente está vinculado con la orden de aprehensión girada en contra del boxeador Julio César Chávez Jr. y de los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán: Ovidio e Iván Archivaldo Guzmán Salazar.
La FGR, a través de la Fiscalía Especializada en materia de Delincuencia Organizada (FEMDO), detalló que Vargas Báez habría tenido un papel de dirección dentro de la estructura criminal, participando en la introducción clandestina de armas, municiones, cartuchos y explosivos al territorio nacional.
El Ministerio Público Federal (MPF) presentó los datos de prueba suficientes para que el juez de control dictara la vinculación a proceso. Se estableció un plazo de tres meses para la investigación complementaria, en la que se reunirán más elementos sobre las actividades ilícitas atribuidas al acusado.
