Un juez federal de Nueva York desestimó definitivamente la demanda de 400 millones de dólares que Justin Baldoni interpuso contra Blake Lively y Ryan Reynolds. El magistrado Lewis Liman confirmó el cierre del caso después de que el actor no presentara nuevos argumentos dentro del plazo legal establecido.

La resolución, emitida el pasado viernes, culmina un conflicto que comenzó cuando Lively denunció a Baldoni por conducta inapropiada durante el rodaje de «Romper el círculo». La actriz alegó que el director protagonizó comportamientos inadecuados y luego orquestó una campaña de desprestigio en su contra.

El juez aceptó la petición de Lively para que el fallo se declarara oficial, manteniendo vigente su solicitud de cobro de honorarios legales. Solo permanece pendiente la determinación de los costos judiciales, según confirmaron fuentes cercanas al proceso.

En junio, el mismo tribunal ya había rechazado la demanda completa al considerar que las acusaciones de Lively contaban con protección legal. La legislación de California ampara las denuncias por acoso laboral presentadas ante autoridades competentes.

Los abogados de la actriz calificaron el resultado como «una victoria total», mientras la defensa de Baldoni insistió en que se trataba de «acusaciones falsas». Lively compartió en redes sociales el impacto emocional del proceso, destacando la importancia de defender el derecho a denunciar.

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