El sacerdote de la colonia La Piedad, del municipio de Tultepec, en el Estado de México, Ernesto Baltazar Hernández Vilchis, fue hallado muerto dentro de un canal de aguas negras este jueves, a dos semanas de ser reportado como desaparecido. Por los hechos, hay dos personas detenidas.
Así lo dio a conocer la fiscalía de ese estado, que detalló que cumplimentó una orden de aprehensión en contra de María Fernanda “N” y Brandon Jonathan “N”, quienes estarían siendo investigados por desaparición cometida por particulares.
Fue el 31 de octubre cuando familiares de la víctima denunciaron la desaparición del hombre de 43 años, por lo que se inició una investigación.
Las autoridades lograron ubicar el vehículo de la víctima en Hidalgo, mismo que fue vendido por los implicados. Además, se ubicó una motocicleta que acompañaba dicha unidad.
Cuando las autoridades encontraron al dueño de la motocicleta, este destacó que prestó la unidad a Brandon porque se la pidió para ir a vender una camioneta a Hidalgo, pues “le habían salido con un fraude”.
Tras esa declaración, los agentes identificaron el domicilio del ahora detenido en la Unidad Habitacional Morelos, Tercera Sección, en el municipio de Tultitlán, el pasado 9 de noviembre.
Una vez ahí, hallaron diversos indicios, entre ellos, ropa del sacerdote y objetos personales. También rastros hemáticos.
Según las indagatorias, el padre Ernesto Baltazar llego al domicilio el pasado 29 de octubre en compañía de una mujer.
De acuerdo con las autoridades, la víctima “convivió por varias horas con la femenina referida y Brandon Jonathan consumiendo bebidas alcohólicas y estupefacientes hasta que, en algún momento, este último presuntamente lo agredió con un objeto punzocortante”.
Al sitio llegó otra mujer identificada como María Fernanda “N”, señalada como pareja sentimental de Brandon y los tres intentaron ocultar el cuerpo envolviéndolo en bolsas y amarrándolo a un sillón.
El 30 de octubre lo trasladaron al municipio de Nextlalpan donde lo abandonaron en aguas negras. En dicho sitio, fue localizado el cadáver.
Ahora, tanto Brandon como María Fernanda están detenidos en el penal de Cuautitlán y en el de Barrientos, respectivamente.
