El partido Morena emitió un comunicado oficial en el que condenó los actos de violencia registrados durante la marcha del 15 de noviembre en el Zócalo de la Ciudad de México. El documento, difundido a través de las redes sociales de la dirigente nacional Luisa María Alcalde, señaló que los hechos fueron ajenos al ánimo popular y criticó la organización de la protesta.

La movilización, encabezada por figuras vinculadas a partidos opositores, terminó con agresiones y daños materiales. Morena aseguró que el carácter “juvenil y apartidista” atribuido por algunos convocantes no se reflejó en la marcha, donde predominó la presencia de adultos mayores y sectores privilegiados.

El comunicado destacó que la participación juvenil fue reducida y que, en varias ciudades del país, la asistencia se limitó a decenas de personas. Incluso en la capital, la presencia de manifestantes habría sido menor en comparación con convocatorias anteriores de grupos opositores.

Uno de los puntos centrales del mensaje fue la condena a los actos de violencia. Morena subrayó la contradicción de que una protesta que rechazaba la violencia terminara con agresiones y destrozos atribuidos a “grupos radicalizados”.

Finalmente, el partido sostuvo que estas conductas buscaban generar un clima de confrontación e inestabilidad, en un momento en que el gobierno federal mantiene una estrategia de pacificación “desde una visión humanista”.