El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, declaró en Jerusalén que la segunda fase del plan de paz impulsado por el presidente estadounidense, Donald Trump, para Gaza es inminente. La propuesta contempla el desarme de Hamás y la desmilitarización del enclave palestino, tras la conclusión de la primera etapa del acuerdo.

Netanyahu hizo el anuncio durante una rueda de prensa conjunta con el canciller alemán, Friedrich Merz, quien expresó una postura cautelosa pero esperanzada respecto a la posibilidad de alcanzar una paz duradera en la región. El mandatario israelí adelantó que una tercera fase buscará la “desradicalización” de Gaza, comparando el proceso con lo ocurrido en Alemania y Japón tras la Segunda Guerra Mundial.

Merz subrayó que Alemania no aplicará sanciones ni boicot contra Israel, asegurando que no existe interés en afectar la cooperación económica y científica entre ambos países. Sin embargo, recalcó que Israel debe rendir cuentas ante el derecho internacional por sus acciones militares, recordando que la agresión fue iniciada por Hamás.

Netanyahu destacó el compromiso de Alemania con la defensa de Israel, a pesar de las tensiones diplomáticas recientes por la ofensiva en Gaza. “Ochenta años tras el Holocausto, Israel defiende ahora a Alemania”, afirmó el primer ministro. El canciller alemán, por su parte, reiteró que Israel tiene derecho a defenderse y a existir.

La visita de Merz comenzó con un encuentro con el presidente israelí, Isaac Herzog. En paralelo, Netanyahu bromeó con periodistas sobre la orden de arresto internacional emitida en su contra por la Corte Penal Internacional (CPI), calificando las acusaciones como “ridículas”.

Las relaciones entre Israel y Alemania se habían tensado en agosto, cuando Berlín restringió exportaciones de armamento hacia Israel debido a la ofensiva en Gaza, que dejó más de 70 mil muertos. Tras el alto al fuego de octubre en la Franja palestina, Alemania levantó dichas medidas.