La Casa Blanca dijo el lunes que demorará la decisión de imponer aranceles a las importaciones estadounidenses de acero y aluminio de la Unión Europea, México y Canadá durante 30 días, evitando una posible batalla comercial con Europa mientras Estados Unidos se prepara para una tensa negociación comercial con China esta semana.
El gobierno del presidente Donald Trump dijo que llegó a un acuerdo con Corea del Sur sobre las importaciones de acero tras conversaciones sobre un tratado comercial revisado. Washington alcanzó pactos preliminares con Argentina, Brasil y Australia sobre el acero y el aluminio que se cerrarán pronto.
En su anuncio, la Casa Blanca dijo que “en todas estas negociaciones, el gobierno se centra en las cuotas que restringirán las importaciones, evitarán el transbordo y protegerán la seguridad nacional”.
Enfrentándose a un plazo autoimpuesto, Trump estaba considerando la posibilidad de eximir de forma permanente a la Unión Europea, México, Canadá, Australia, Argentina y Brasil de los aranceles del 25% a las importaciones de acero y del 10% a las de aluminio aprobados por su gobierno en marzo. La Casa Blanca ya concedió exenciones temporales en marzo, y tenía hasta el lunes por la noche para decidir sobre su ampliación.
La UE dijo que si pierde sus privilegios responderá aplicando nuevos aranceles a productos estadounidenses importados por el bloque.
Alemania reconoció el aplazamiento señalando que sigue a la espera de “una exención permanente”. La Unión Europea es el mayor exportador de acero a Estados Unidos, que supuso aproximadamente el 5% del total de las importaciones estadounidenses el año pasado.
Alemania, estado miembro de la UE, “decidirá como continuar”, dijo una portavoz de la canciller de Alemania, Angela Merkel, en un comunicado.
“Ni la Unión Europea ni Estados Unidos pueden estar interesados en una escalada de las tensiones comerciales”, señaló la nota, añadiendo que “en su lugar, ambas partes se beneficiarían de una relación comercial más profunda”.