Una de las dos cajas negras del avión que se desplomó el viernes cerca de La Habana, fue localizada “en buenas condiciones”, informó el ministro de Transporte de Cuba, Adel Yzquierdo Rodríguez.
Yzquierdo dijo a la televisión estatal cubana que los investigadores trabajan intensamente en una zona de cultivo situada a un kilómetro de la Terminal 1 del Aeropuerto Internacional “José Martí”.
Mientras, tres mujeres cubanas se aferraban dramáticamente a la vida este sábado y permanecían en un hospital de la isla en estado crítico tras la peor tragedia aérea en Cuba en la historia reciente.
Entre las víctimas se encontraban 20 pastores de una iglesia evangélica que habían participado en varias jornadas en La Habana, según informó Maité Quesada, integrante del Consejo de Iglesias de Cuba, a la agencia AP.
Yzquierdo Rodríguez, dijo el sábado que murieron 110 de las 113 personas iban a bordo del Boeing 737 que se desplomó el viernes por el mediodía cerca de La Habana, dejando un escenario de hierros calcinados.
El funcionario indicó que en el avión viajaban 102 cubanos, tres turistas, dos extranjeros residentes en la isla y seis miembros de la tripulación originarios de México.
Las sobrevivientes fueron identificadas como Grettel Landrovell de 23 años, Maylen Díaz de 19 y Emiley Sánchez de 39. Landrovell se encontraba en estado de coma.
Las tres son atendidas en el Hospital Calixto García de La Habana y los especialistas pidieron cautela.
“Nosotros como médicos siempre tenemos la esperanza y la expectativa de que podamos recuperar a las pacientes”, dijo el sábado a un pequeño grupo de periodistas Carlos Alberto Martínez, el director del hospital.
“Pero tenemos que ser conscientes de que presentan severas lesiones”, agregó Martínez. “Tienen un estado crítico”.
El gobierno cubano decretó el fin de semana de duelo nacional debido a la tragedia, por lo que las banderas cubanas estarán a media asta.