“Estoy al 100 y líder no va a faltar”, así lo dijo Andrés Manuel López Obrador candidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia en el municipio de Teziutlán, Puebla, lugar donde le dijo a Vicente Fox Quezada, que mejor apure el paso para ayudar a José Antonio Meade o a Ricardo Anaya, porque va 26 puntos arriba.
En una plaza totalmente abarrotada, López Obrador informó a la gente que está en perfecto estado de salud, por lo que desecho estar enfermo o al borde de la muerte como han querido hacer creer sus adversarios.
Acentuó, sobre las preferencias electorales en el estado, una distancia de 20 puntos entre Luis Miguel Barbosa Huerta sobre Martha Erika Alonso, y aprovechó –como lo hace en sus visitas a Puebla- para pedir voto parejo a todos los abanderados de la coalición Juntos Haremos Historia.
López Obrador enumeró sus propuestas, aunque como siempre, cuando habla del retiro de pensión a los expresidente de la república, la gente aplaude sin cesar.
Fue en este momento cuando hizo referencia a Vicente Fox, de quien, dijo, anda enojado porque le quitará su pensión mensual de 5 millones de pesos, «a él, continuó, le digo que no es venganza, es justicia«.
Dijo que no se reelegirá en el cargo, además de que se va a acabar la corrupción en el país: “me canso ganso, soy muy necio, hasta mis adversarios lo dicen”.
López Obrador remató: “Con ustedes voy a terminar el sexenio, no más, no me voy a reelegir porque soy partidario del sufragio efectivo no reelección. No hace falta más tiempo, en seis años vamos a limpiar de corrupción al país, se va a acabar la robadera”.