A los 12 futbolistas adolescentes y su entrenador atrapados desde el 23 de junio en una cueva inundada del norte de Tailandia les ha salido un nuevo héroe al rescate: el multimillonario emprendedor espacial y fabricante de autos eléctricos Elon Musk.
La liberación de los 13, que podría demorarse varios meses, está resultando extremadamente difícil, especialmente por la escasez de oxígeno. En la madrugada de este viernes murió un buzo de 38 años que trabajó con la Marina tailandesa y que intentó ayudarlos llevándoles oxígeno y provisiones. Falleció al regresar a la superficie. Pero Musk cree que tiene un plan que puede funcionar.
El magnate estadounidense ofreció sus servicios a las autoridades del país asiático a través de su cuenta oficial de Twitter.
«Sospecho que el gobierno tailandés tiene la situación bajo control, pero estaré encantado de poder ayudar si hay una forma de hacerlo».
El plan de Musk es el siguiente: introducir un tubo de nylon dentro de la cueva y llenarlo de aire «como un castillo inflable» para crear un túnel submarino.
Musk dijo que su empresa The Boring Company, una compañía de excavación e infraestructuras que fundó en 2016 y con la que prevé conquistar el subsuelo, «tiene un avanzado radar de sondeo terrestre y es muy buena para cavar hoyos».
«Tal vez valga la pena intentarlo: insertar un tubo de nylon de un metro de diámetro (o un conjunto de tubos más cortos para las secciones más difíciles) a través de la red de cuevas e inflarlo con aire», propuso.
«Eso debería crear un túnel de aire bajo el agua contra el techo de la cueva que se adapte a formas extrañas como las que hay en el agujero de 70 cm», explicó.
Además, un vocero de la firma declaró lo siguiente: «Estamos manteniendo conversaciones con el gobierno tailandés para ver cómo podemos ayudar, y vamos a mandar a gente de SpaceX y de The Boring Company de Estados Unidos a Tailandia para ofrecer apoyo sobre el terreno». «Una vez que confirmemos qué es lo que será más útil de enviar o hacer, lo haremos. Estamos recibiendo información y orientación de gente que está allí, en Chiang Rai, para determinar cuál es la mejor manera de ayudarles», agregó el vocero.
Musk también dijo que podría suministrar Powerpacks (dispositivos de almacenamiento de energía) y bombas (hidráulicas) «completamente cargadas» para ayudar a las autoridades del país, así como sistemas de localización que permitan conocer la ubicación exacta de los afectados.
La situación de los niños atrapados puede complicarse debido a que las cuevas suelen inundarse durante la temporada de lluvias del monzón, que comienza en junio y dura hasta finales de septiembre u octubre. Drenar el agua sería una de las tareas prioritarias.
La cueva Tham Luang, donde se encuentran los niños, es la cuarta más larga de Tailandia. El grupo quedó atrapado tras una inundación repentina.
James Yenbamroong, fundador y director ejecutivo de la empresa tailandesa de comunicaciones satelitales Mu Space Corp -que ofrece servicios de internet de banda ancha en zonas rurales del país- dijo que el equipo de SpaceX, la compañía de transporte aeroespacial de Musk, se puso en contacto con ellos el jueves «para que les ayudaran a establecer conexiones con el gobierno tailandés».
Según un reporte de Bloomberg, por ahora no está claro si los funcionarios tailandeses han aceptado la oferta de Musk.
Los niños atrapados en la cueva tienen edades comprendidas entre los 11 y 16 años y su entrenador, 25. De momento, sus condiciones de salud parecen buenas, aunque algunas imágenes les mostraron algo desorientados. La salida está llena de obstáculos y el grupo se encuentra a unos 4 km de la entrada de la cueva.