El expresidente de Francia Nicolas Sarkozy perdió el jueves una apelación contra una decisión legal anterior y podría ser juzgado por la presunta financiación ilegal de su campaña al Elíseo en 2012.
Una corte de apelaciones de París ratificó un fallo del año pasado que ordenaba que Sarkozy sea juzgado por supuesto fraude durante su fracasada campaña para la reelección.
Sarkozy apelará el dictamen ante la Corte de Casación, el máximo tribunal del país, explicó el abogado del expresidente, Thierry Herzog.
Sarkozy enfrenta acusaciones de que su campaña superó con mucho el techo de gasto de 22,5 millones de euros (24 millones de dólares) e intentó encubrirlo de forma fraudulenta. La denuncia se centra en si el expolítico, de 61 años, estaba al tanto de la presunta facturación falsa y el fraude vinculado a la empresa de relaciones públicas Bygmalion. Algunos ejecutivos de la firma admitieron prácticas contables falsas.
El exdirigente se ha visto implicado en múltiples casos de corrupción desde que dejó el cargo en 2012.
No pudo ganar las primarias de su partido en 2017 para optar a la presidencia y desde entonces se ha mantenido alejado de la política.
En marzo, una corte ordenó juzgar a Sarkozy por corrupción y tráfico de influencias en otro caso y tiene otro proceso abierto por la presunta aceptación de millones para financiar ilegalmente su campaña del entonces dictador libio Moammar Gadhafi.