Al menos 30 personas que buscaban oro en el lecho de un río fallecieron este domingo por una inundación repentina en la provincia de Badakhshan, en el noreste de Afganistán, informaron las autoridades.
Además de los muertos, decenas de personas resultaron heridas a causa de un alud de tierra y la crecida del río, en el distrito de Kohistan, precisó Nek Mohammad Nazari, vocero del gobernador provincial. La zona está a unos 110 kilómetros (68 millas) de Fayzabad, la capital de Badakhshan.
Según Nazari, los aldeanos habrían excavado en el río, de donde ya se ha encontrado oro anteriormente, cuando se vieron sorprendidos por la inundación repentina. El número de muertos podría aumentar, agregó.
Las víctimas eran aldeanos que buscaban oro ilegalmente, según el funcionario.
“Se han enviado equipos de rescate a la zona para ayudar a recuperar los cuerpos”, dijo Nazari.
Sanaullah Rohani, portavoz del jefe de policía de Badakhshan, dijo que siete de los heridos se encontraban en estado crítico. Según Rohani, había unas 50 personas buscando oro ilegalmente en el momento del alud.
Fawzia Kofi, un legislador de Badakhshan confirmó la tragedia, pero sostuvo que el número de fallecidos fue de 40 personas.
Afganistán es una nación montañosa y sin salida al mar que cuenta con enormes reservas de cobre, mineral de hierro, cromita, mercurio, zinc, gemas -incluidos rubíes y esmeraldas-, así como oro y plata, que en su mayor parte están intactas.
Las minas están dispersas en distintas provincias del país, pero el gobierno aún no ha sido capaz de lograr inversiones en este sector ni de establecer una industria extractiva próspera.