París celebró este jueves una jornada de homenaje a los bomberos que salvaron del colapso a la catedral de Notre Dame y rescataron sus tesoros de las llamas.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, recibía a los bomberos para un encuentro especial en la que se compartirán “palabras de agradecimiento”, según su oficina. Altos cargos del gobierno participarán en el acto en el palacio presidencial.
Más tarde, el Ayuntamiento de París tenía previsto celebrar una ceremonia en su honor con un concierto, dos banderas gigantes y lecturas de la novela El jorobado de Notre Dame de Victor Hugo.
Más de 400 bomberos participaron en una batalla contra el fuego de nueve horas para salvar la catedral del siglo 12 el pasado lunes. La aguja se derrumbó y el tejado quedó destruido, pero sus emblemáticas torres, rosetones, el órgano y las obras de arte se salvaron.
Además, nadie murió en el incendio, que comenzó durante una misa, después de que bomberos y empleados de la iglesia evacuaran con rapidez a los que estaban dentro.
Entre los homenajeados hoy jueves estaba el capellán de bomberos Jean-Marc Fournier, que ayudó a salvar la corona de espinas que según la tradición católica llevaba Jesucristo cuando fue crucificado.
Los investigadores consideran por ahora que se trató de un incendio accidental y están entrevistando a personal del templo y a los trabajadores que realizaban tareas de restauración cuando comenzó el fuego.
Unas 40 personas han sido interrogadas y algunas serían entrevistadas de nuevo el jueves, según la fiscalía de París.
Los responsables de bomberos han advertido que la enorme catedral sigue estando frágil y han retirado algunas esculturas sobre los rosetones para evitar que se caigan.
El edificio habría ardido hasta los cimientos en un “colapso de reacción en cadena” si los bomberos no hubieran actuado tan rápido como lo hicieron para combatir las llamas en todo el edificio, afirmó José Vaz de Matos, un experto en incendios que trabaja con el Ministerio francés de Cultura.
La primera alarma de incendios sonó a las 18:20 cuando se celebraba una misa en la catedral, pero no se encontró el incendio. Una segunda alarma sonó a las 18:43, y entonces se localizó el fuego en el tejado.
Macron quiere reconstruir Notre Dame en cinco años, a tiempo para los Juegos Olímpicos de Verano que acoge París en 2024, pero los expertos han puesto en duda que el plazo sea realista, dada la enormidad del trabajo por hacer. Uno de ellos señaló que la reconstrucción podría fácilmente tomar 15 años. Se han ofrecido casi mil millones de dólares para la restauración del templo.
Las campanas de las catedrales de toda Francia sonaron el miércoles en un homenaje a Notre Dame y a los bomberos.